Gracias, querida amiga, por tus gratas palabrascarmen Parra escribió:Pilar cuanta belleza en este poema a tanta madre coraje que se derraman en ternura y dan hasta su sangre,,
Precioso poeta
Un abrazo grande
Carmen
Besos
Pilar
Moderadores: J. J. Martínez Ferreiro, Rafel Calle
Gracias, querida amiga, por tus gratas palabrascarmen Parra escribió:Pilar cuanta belleza en este poema a tanta madre coraje que se derraman en ternura y dan hasta su sangre,,
Precioso poeta
Un abrazo grande
Carmen
Mirta Elena Tessio escribió:Mucha fuerza en este poema, veo que empoderas lo femenino. Es coraje que nadie reconoce GRata la lectura.- Abrazos.-Pilar Morte escribió:Ella era la madre coraje
porque sus huellas eran de pies esperanzados,
porque cuando vivía hacia adentro
era para exprimir el corazón y donar
la gota que regeneraba llagas,
porque su ombligo era del mundo,
porque la estrella que le daba luz
la anudaba
como un cordón umbilical a la vida,
Sí, la llamaban madre coraje
porque nutría y hacía soñar
a los que imploraban a su puerta,
porque la dureza que la rodeaba
le hacía dormir con un solo ojo
y despertar con la alegría del ganador.
Pienso en ella y siento que pocas cosas me sirven
para caminar a su lado.
Ella tiene verdad en sus estelas,
y su llanto dura lo que la nieve al sol.
Una respiración profunda la restituye al camino
porque hay demasiada vida reclamando sus manos.
El amor sostiene en vertical su cuerpo y su mente,
y sólo se reclina para bañar de ilusión a los muertos.
Madre coraje,
espejo de expulsados,
bosque donde cobijas miserias sin nido,
imagen para contemplar la belleza,
farola que no muere en el día.
¡Cuántas madres coraje en silencio!!!
Aplaudo tus versos y el coraje que te animó a escribirlos, amiga Pilar, y contagiarnos de esa fuerza necesaria para que la vida sea merecedora de su nombre. Un abrazo.Pilar Morte escribió: La llamaban la madre coraje
porque sus huellas eran de pies esperanzados,
porque cuando vivía hacia adentro
era para exprimir el corazón y donar
la gota que regeneraba llagas,
porque su ombligo era del mundo,
porque la estrella que le daba luz
la anudaba
como un cordón umbilical a la vida,
Sí, la llamaban madre coraje
porque nutría y hacía soñar
a los que imploraban a su puerta,
porque la dureza que la rodeaba
le hacía dormir con un solo ojo
y despertar con la alegría del ganador.
Pienso en ella y siento que pocas cosas me sirven
para caminar a su lado.
Ella tiene verdad en sus estelas,
y su llanto dura lo que la nieve al sol.
Una respiración profunda la restituye al camino
porque hay demasiada vida reclamando sus manos.
El amor sostiene en vertical su cuerpo y su mente,
y sólo se reclina para bañar de ilusión a los muertos.
Madre coraje,
espejo de expulsados,
bosque donde cobijas miserias sin nido,
imagen para contemplar la belleza,
farola que no muere en el día.
¡Cuántas madres coraje en silencio!!!
Sí, en este mundo hay personas (lamentablemente la minoría) que nos sorprenden por su voluntad y su empatía. Muy hermoso poema, Pilar. Un abrazo, amiga.[/quotLuis M. escribió:[quote="Pilar Morte"
porque su ombligo era del mundo,
porque la estrella que le daba luz
la anudaba
como un cordón umbilical a la vida,
Gracias, Alex por dejar tus amables palabras.Àlex Gállego escribió:Me gustó el poema. Tiene una hondura que conmueve, es un homenaje muy bello. Gracias por compartir el poema.
Un abrazo
Àlex
Pilar Morte escribió:La llamaban la madre coraje
porque sus huellas eran de pies esperanzados,
porque cuando vivía hacia adentro
era para exprimir el corazón y donar
la gota que regeneraba llagas,
porque su ombligo era del mundo,
porque la estrella que le daba luz
la anudaba
como un cordón umbilical a la vida,
Sí, la llamaban madre coraje
porque nutría y hacía soñar
a los que imploraban a su puerta,
porque la dureza que la rodeaba
le hacía dormir con un solo ojo
y despertar con la alegría del ganador.
Pienso en ella y siento que pocas cosas me sirven
para caminar a su lado.
Ella tiene verdad en sus estelas,
y su llanto dura lo que la nieve al sol.
Una respiración profunda la restituye al camino
porque hay demasiada vida reclamando sus manos.
El amor sostiene en vertical su cuerpo y su mente,
y sólo se reclina para bañar de ilusión a los muertos.
Madre coraje,
espejo de expulsados,
bosque donde cobijas miserias sin nido,
imagen para contemplar la belleza,
farola que no muere en el día.
¡Cuántas madres coraje en silencio!!!
Un hermoso homenaje a la bondad y al arrojo contra la injusticia...(en silencio)Pilar Morte escribió:La llamaban la madre coraje
porque sus huellas eran de pies esperanzados,
porque cuando vivía hacia adentro
era para exprimir el corazón y donar
la gota que regeneraba llagas,
porque su ombligo era del mundo,
porque la estrella que le daba luz
la anudaba
como un cordón umbilical a la vida,
Sí, la llamaban madre coraje
porque nutría y hacía soñar
a los que imploraban a su puerta,
porque la dureza que la rodeaba
le hacía dormir con un solo ojo
y despertar con la alegría del ganador.
Pienso en ella y siento que pocas cosas me sirven
para caminar a su lado.
Ella tiene verdad en sus estelas,
y su llanto dura lo que la nieve al sol.
Una respiración profunda la restituye al camino
porque hay demasiada vida reclamando sus manos.
El amor sostiene en vertical su cuerpo y su mente,
y sólo se reclina para bañar de ilusión a los muertos.
Madre coraje,
espejo de expulsados,
bosque donde cobijas miserias sin nido,
imagen para contemplar la belleza,
farola que no muere en el día.
¡Cuántas madres coraje en silencio!!!
Gracias, José M. por venir y dejar tu amable palabraJosé Manuel F. Febles escribió:Excelente poema, Pilar. Al nombrar la palabra madre me dejas de rodilla.
Un enorme abrazo desde mi isla
José Manuel F. Febles
Tienes razón, así es en esas situaciones. Gracias por venir, querido amigo.J. J. Martínez Ferreiro escribió:Pocas mujeres hay que no sean madre coraje. Puestas en una situación límite, son bestias de protección, fidelidad sin recompensa.
Todo un entrañable homenaje, Pilariña.
Un bico desde Viveiro