Editorial Alaire

Rafael Valdemar escribió:Sugerente y bello el poema que nos dejas Ramón. Me gustó y disfruté leyendo

saludos

rafael

José Manuel F. Febles escribió:Cada verso de tu excelente poema, nos lleva a una reflexión sobre la propia existencia. Me ha gustado su lectura.
Desde la soledad de mi isla, un fuerte abrazo.

José Manuel F. Fenbles

Rafel Calle escribió:

Ramón Carballal escribió:¿Te has preguntado, alguna vez, por el peso de tu nombre?
¿Y por la calidez que un día entregaste, o la palabra
que fue esa palabra que alguien, al fin, supo escuchar?
Has sido parteluz de un sueño, ojal en la nube oscura,
rayo que, indómito, crece en los iris sin color.
Una presencia y un disfraz, un verbo que ya no es tuyo,
la sed de la lujuria en la misma edad del párpado adolescente.
Y el céfiro que mata el carmín del horizonte, solo
una mueca el dulce visaje de tu huida, solo el resplandor
de aquel diálogo entre la ilusión y el mar del olvido
aún persiste en ti junto a las olas blancas del recuerdo.

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Amigo Ramón:
Si hay un caso de autor prolífico dentro de una calidad alta como el Everest, ese eres tú. Sin duda, una de las grandes voces de la poesía actual y, por aquellas cosas del azar, también uno de los grandes paradigmas de Alaire, icono de la versificación multimétrica en su estadio de simbolismo tremendamente sensorial.
Está de más decir que el presente poema es otra muesca en tu vasta y bellísima obra.
Ha sido un placer leerte, siempre es un privilegio interactuar contigo. Muchas gracias por todo.
Un fuerte abrazo.

Ramón Castro Méndez escribió:

Ramón Carballal escribió:¿Te has preguntado, alguna vez, por el peso de tu nombre?
¿Y por la calidez que un día entregaste, o la palabra
que fue esa palabra que alguien, al fin, supo escuchar?
Has sido parteluz de un sueño, ojal en la nube oscura,
rayo que, indómito, crece en los iris sin color.
Una presencia y un disfraz, un verbo que ya no es tuyo,
la sed de la lujuria en la misma edad del párpado adolescente.
Y el céfiro que mata el carmín del horizonte, solo
una mueca el dulce visaje de tu huida, solo el resplandor
de aquel diálogo entre la ilusión y el mar del olvido
aún persiste en ti junto a las olas blancas del recuerdo.

Me uno a lo dicho por los compañeros que me han precedido y me sumo a la marea alta de tan hermosas letras.

Mi felicitación y abrazo.

Ana Muela Sopeña escribió:Excelentes letras, Ramón:

Me ha gustado mucho.
Felicitaciones
Ana

Ricardo López Castro escribió:Un bello poema y reflexivo.
Un placer haberlo leído.
Saludos y abrazos, con mis mejores deseos y bendiciones.

Ramón Carballal escribió:¿Te has preguntado, alguna vez, por el peso de tu nombre?
¿Y por la calidez que un día entregaste, o la palabra
que fue esa palabra que alguien, al fin, supo escuchar?
Has sido parteluz de un sueño, ojal en la nube oscura,
rayo que, indómito, crece en los iris sin color.
Una presencia y un disfraz, un verbo que ya no es tuyo,
la sed de la lujuria en la misma edad del párpado adolescente.
Y el céfiro que mata el carmín del horizonte, solo
una mueca el dulce visaje de tu huida, solo el resplandor
de aquel diálogo entre la ilusión y el mar del olvido
aún persiste en ti junto a las olas blancas del recuerdo.

Alejandro Costa escribió:

Ramón Carballal escribió:¿Te has preguntado, alguna vez, por el peso de tu nombre?
¿Y por la calidez que un día entregaste, o la palabra
que fue esa palabra que alguien, al fin, supo escuchar?
Has sido parteluz de un sueño, ojal en la nube oscura,
rayo que, indómito, crece en los iris sin color.
Una presencia y un disfraz, un verbo que ya no es tuyo,
la sed de la lujuria en la misma edad del párpado adolescente.
Y el céfiro que mata el carmín del horizonte, solo
una mueca el dulce visaje de tu huida, solo el resplandor
de aquel diálogo entre la ilusión y el mar del olvido
aún persiste en ti junto a las olas blancas del recuerdo.

Me encanta leerte porque siempre encuentro belleza y siempre tienes algo que enseñar,
y yo algo que aprender.

El poema es una pequeña maravilla. Respecto a las metáforas, bien construidas
y sin abusar de ellas.

En fin, lo de siempre Ramón, que sabes que te admiro.

Un fuerte abrazo.

Pilar Morte escribió:Grandioso, como siempre. Un camino de excelsa poesía. Felicidades
Besos
Pilar