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Guillermo Cuesta escribió:Ya sabes lo que siento, corazón;
hay formula dificil y contrita
que guarda en sus latidos la razón:
la razón más pensada, más ahíta,
más incoherente e insatisfecha,
que al no dilucidar si está maldita
se siente coaccionada y tan pertrecha
que corre por sus venas la morralla,
saliendo por los poros la cosecha.
Estoy sangrantemente en mi batalla
con todos los resortes ya vencidos
y atento a lo que diga la canalla.
De todos los castigos merecidos
hay uno que parece impertinente:
ha entrado por detrás de los latidos.
Nunca quiso pasarse por mi frente
y pocas veces puso un pensamiento
en la curva indecisa de mi mente.
Casi nunca descubro lo que siento.
Casi siempre me agobia la intención
la lumbre que me quema a fuego lento
pues siempre y nunca me encuentro la razón.
Rosa Marzal escribió:Tantas veces la razón muere en la batalla y acaba imponiéndose la sinrazón.
Buen poema, Guillermo. Mi felicitación, amigo.
Un abrazo,
Espléndido trabajo, Guillermo! La duda hace al ser del hombre sabio. Un abrazo.Guillermo Cuesta escribió:Ya sabes lo que siento, corazón;
hay formula dificil y contrita
que guarda en sus latidos la razón:
la razón más pensada, más ahíta,
más incoherente e insatisfecha,
que al no dilucidar si está maldita
se siente coaccionada y tan pertrecha
que corre por sus venas la morralla,
saliendo por los poros la cosecha.
Estoy sangrantemente en mi batalla
con todos los resortes ya vencidos
y atento a lo que diga la canalla.
De todos los castigos merecidos
hay uno que parece impertinente:
ha entrado por detrás de los latidos.
Nunca quiso pasarse por mi frente
y pocas veces puso un pensamiento
en la curva indecisa de mi mente.
Casi nunca descubro lo que siento.
Casi siempre me agobia la intención
la lumbre que me quema a fuego lento
pues siempre y nunca me encuentro la razón.
Francisco López Delgado escribió:Extraordinario poema, lleno de sabiduría y hecho con oficio. Enhorabuena amigo. Saludos cordiales.
Me quedo este terceto, amigo Gyuillermo. Un abrazo grande.Guillermo Cuesta escribió:
Estoy sangrantemente en mi batalla
con todos los resortes ya vencidos
y atento a lo que diga la canalla.
Ramón Castro Méndez escribió:Guillermo Cuesta escribió:Ya sabes lo que siento, corazón;
hay formula dificil y contrita
que guarda en sus latidos la razón:
la razón más pensada, más ahíta,
más incoherente e insatisfecha,
que al no dilucidar si está maldita
se siente coaccionada y tan pertrecha
que corre por sus venas la morralla,
saliendo por los poros la cosecha.
Estoy sangrantemente en mi batalla
con todos los resortes ya vencidos
y atento a lo que diga la canalla.
De todos los castigos merecidos
hay uno que parece impertinente:
ha entrado por detrás de los latidos.
Nunca quiso pasarse por mi frente
y pocas veces puso un pensamiento
en la curva indecisa de mi mente.
Casi nunca descubro lo que siento.
Casi siempre me agobia la intención
la lumbre que me quema a fuego lento
pues siempre y nunca me encuentro la razón.
Pilar Morte escribió:Inteligente forma de versificar.
Razones puede haber muchas o ninguna. Pero siempre sucede por algo.
Me gustó leerte
Besos
Pilar
Me encantó que te gustaran mis tercetos encadenados. Cuando hay duda la del sabio es morrocotuda.Carlos Justino Caballero escribió:Espléndido trabajo, Guillermo! La duda hace al ser del hombre sabio. Un abrazo.Guillermo Cuesta escribió:Ya sabes lo que siento, corazón;
hay formula dificil y contrita
que guarda en sus latidos la razón:
la razón más pensada, más ahíta,
más incoherente e insatisfecha,
que al no dilucidar si está maldita
se siente coaccionada y tan pertrecha
que corre por sus venas la morralla,
saliendo por los poros la cosecha.
Estoy sangrantemente en mi batalla
con todos los resortes ya vencidos
y atento a lo que diga la canalla.
De todos los castigos merecidos
hay uno que parece impertinente:
ha entrado por detrás de los latidos.
Nunca quiso pasarse por mi frente
y pocas veces puso un pensamiento
en la curva indecisa de mi mente.
Casi nunca descubro lo que siento.
Casi siempre me agobia la intención
la lumbre que me quema a fuego lento
pues siempre y nunca me encuentro la razón.
jJulio Gonzalez Alonso escribió:Guillermo Cuesta escribió:
Estoy sangrantemente en mi batalla
con todos los resortes ya vencidos
y atento a lo que diga la canalla.
[/quomigo Gyuillermo. Un abrazo grande.
Salud.