Página 2 de 2
Re: Happy hour
Publicado: Sab, 29 Ago 2020 10:08
por Jorge Salvador
Es un poema trepidante, donde reflejas perfectamente esa búsqueda interior (casi siempre sin resultados) de la felicidad por parte del común mortal. No sería capaz de destacar ningún verso, todos van encadenados a la perfección y se complementan para formar un todo que te deja reflexionando durante un buen rato sobre qué coño has hacho con tu vida en tantos años de rodar y rodar.
Te felicito, Luis, la inspiración pasa mucho por tu casa...
Un abrazo, querido amigo y ante todo poeta
Re: Happy hour
Publicado: Sab, 29 Ago 2020 12:12
por Luis M
Jorge Salvador escribió:Es un poema trepidante, donde reflejas perfectamente esa búsqueda interior (casi siempre sin resultados) de la felicidad por parte del común mortal. No sería capaz de destacar ningún verso, todos van encadenados a la perfección y se complementan para formar un todo que te deja reflexionando durante un buen rato sobre qué coño has hacho con tu vida en tantos años de rodar y rodar.
Te felicito, Luis, la inspiración pasa mucho por tu casa...
Un abrazo, querido amigo y ante todo poeta
Muchas gracias, Ramón. Supongo que es un poema un tanto escéptico y pesimista sobre esa utopía llamada felicidad (sobre todo la de "amplio espectro") ... Y bueno, me ha costado más de tres años y 41 reediciones dejarlo un poco decente para mi gusto, ¡ya está bien!

. Me alegra mucho que te gustara. Un fuerte abrazo amigo.
Re: Happy hour
Publicado: Sab, 29 Ago 2020 12:14
por Ricardo Serna G
Luis
La vida es poesía
y la poesía vuelve
a la vida..
Hermoso poema con la calidad de tu pluma
Un abrazo fuerte, querido amigo
Re: Happy hour
Publicado: Sab, 29 Ago 2020 12:16
por Luis M
Ricardo Serna G escribió:Luis
La vida es poesía
y la poesía vuelve
a la vida..
Hermoso poema con la calidad de tu pluma
Un abrazo fuerte, querido amigo
Muchas gracias, estimado Ricardo. Un fuerte abrazo amigo.
Re: Happy hour
Publicado: Mié, 02 Sep 2020 14:30
por E. R. Aristy
Luis M. escribió:``
Podrías saludar a cada nueva mañana
con una sonrisa de oreja a oreja,
y un Buenos Días tan grande
y tan esplendoroso como el Taj Mahal.
Dar la vuelta a tu vida
como a un colchón de nueve años
(demasiado tiempo para un colchón)
Volverte un fanático del water-yoga,
un crack en el arte del bonsai
o un devoto de los alimentos sin.
Podrías cambiarte de ojos
(metafóricamente hablando, claro está)
ensordecer a placer
por uno solo o por ambos oídos.
Guardar en la mesilla del dormitorio
un par de conciencias de repuesto
para la hora del sueño,
y hasta tener bajo la tele
(en ese minimalista mueble que la sostiene)
un kit de tripas y estómago incluido
para escuchar, imperturbable, las noticias
de las ocho y media de la noche.
... Y podrías, también, mitigar
esa urticante sensación
de desapego existencial
con una barbacoa y una borrachera semanales,
con un esporádico polvo
de película,
y hasta creerte
el mismísimo agente 007 en acción
(el día que esa encantadora parejita
de insaciables llorones
duermen plácidamente
en casa de la abuelita)
Pero no,
ni todo eso matará
los monstruos hiperactivos
y esas hormigas gigantes
de colores chillones
que juegan a rodearte
y a disparar rayos, flechas y balas de plata
contra el último reducto superviviente
de cerebro donde almacenas
la absurda idea en que de alguna
extraña y compleja forma
pudieras llegar a sentirte
medianamente satisfecho de tu vida,
a gusto con el mundo,
y poder hacer las paces
con este asquito de humanidad.
Ni así cesarán los temblores,
esas náuseas y sudores fríos
que te llevan irremediablemente
de nuevo a destapar esa botella
de añejo y resignado pesimismo,
con ese intenso toque de dulce apatía y
aquel terroso matiz de resiliencia antiminas,
y beberte de un trago
la cantidad necesaria para que por un rato,
aunque solo sea por un fugaz instante,
imaginarte
el tipo que no tiene la más remota
necesidad de ser feliz,
de pertenecer a ningún puto grupo
de guasap,
ni sentirte culpable
por haber desperdiciado
una vez tras otra
tu suerte al nacer
y todo lo bueno que hicieron
tus progenitores
(y aquella preciosa novia de la facultad,
en segundo de derecho) por ti.
Porque, amigo, no te engañes,
la felicidad es solo asunto
de ingenuos rumiantes,
-justo hasta el momento de subir al camión-
y también de depredadores
que nunca soñaron
con algún mundo ideal,
(únicamente con tener la panza llena,
los testículos vacíos,
y una reconfortante siesta diaria
anti-remordimientos)
Lo demás son solo
cosa de anuncios televisivos
lubrificados tras rock hits
y desbarajustes climático-hormonales:
Un simple film de princesitas
y princesitos bobos en descapotable
(hij@s de papá-rey-bobo)
y/o hadas madrinas viejas y resabiadas
con la piel requemada por el sol,
ex-superfumadas y en vaqueros.
... No more my friend!
____________
Tu originalidad refrescante, tu impactante imagineria, tu fuerza creativa, te sitúan entre quienes son poetas au natural. Te felicito, Luis M., siempre un beneplácito leerte. Abrazos, ERA
Re: Happy hour
Publicado: Mié, 02 Sep 2020 15:35
por Luis M
E. R. Aristy escribió:
Tu originalidad refrescante, tu impactante imagineria, tu fuerza creativa, te sitúan entre quienes son poetas au natural. Te felicito, Luis M., siempre un beneplácito leerte. Abrazos, ERA
Muchas gracias, ERA, eres muy amable. Un fuerte abrazo, compañera.
Re: Happy hour
Publicado: Vie, 04 Sep 2020 15:43
por Julio Gonzalez Alonso
Nada que objetar. El baño de realismo en que nos sumerge el poema no deja lugar a especulaciones. Mi aplauso, Luis M. Salud.
Re: Happy hour
Publicado: Vie, 04 Sep 2020 19:14
por Luis M
Julio Gonzalez Alonso escribió:Nada que objetar. El baño de realismo en que nos sumerge el poema no deja lugar a especulaciones. Mi aplauso, Luis M. Salud.
Muchas gracias, Julio. Abrazos y salud, compañero.