Editorial Alaire

Alejandra Goerne escribió:Precioso Ricardo... se canta este poema. Y bue... los cerezos que no siempre están en flor hoy lucen...radiantes con estos versos. Me ha encantado pasar por aquí.

S.Castelar escribió:Precioso poema Ricardo, desbordante de fuerza incluso en la extrema fragilidad de la imagen.

Un placer leerte

Sara

Marian Heredia escribió:!Preciosas metáforas!
lo he leído en voz alta
y sentí el aroma y sabor
de los cerezos.Un fuerte abrazo

Juan Cruz Bordoy escribió:Al escuchar aquella melodía, tal vez recuerdes aquella voz, y veas aquella luz. Siempre aprendo mucho contigo.
Un abrazo y un beso.
Juan Cruz.

Óscar Distéfano escribió:Muy bueno, maestro. Como siempre, con ese decir
medido y elegante. Un placer la lectura.

Un abrazo.
Óscar

Blanca Sandino escribió:Lo que fuimos, lo que somos. Y, quizá, la tentación de ser lo que ni fuimos ni somos.

A veces... ay, amigo mío, y es que el amor -el amor- puede ser perjudicial para la salud.

Un placer leerte.

Blanca

Ricardo Serna G escribió:


Aliento de invierno


Arrójate en el grito de la piel
estrechándote a la paz de los cerezos,
arrójate a esa espada sin retorno
con la última mirada del tiempo
que es más vida
de antes y después
que la nieve vista el viento.
Escúchate con las furias del reclamo
con el castigo en danza
de lo que fuimos y quisimos,
escúchate entre flautas y los ojos
de la remota lengua de estrellas
en sus tibios nombres del deseo
sin olvido
con blancas noches
en maternidad de voz y luz.

Ligia Calderón Romero escribió:Ricardo Serna G,

Grandiosa pieza poética en este maravillosos grito de tus letras plasmado en bellas imágenes y un cierre fenomenal. Me encantaron las metáforas y esa final de perla.
Saludos cordiales y mi admiración por tus letras.

J. J. M. Ferreiro escribió:Mágico y precioso... hechizan sus versos.

Un fuerte abrazo querido amigo

Francisco Lobo escribió:Es uno de esos poemas atemporales, de los que valen para siempre, eterno, mi amigo. Felicidades. Un abrazo.

Víctor Vergara Valencia escribió:.

Amigo y naestro Ricardo, eso creo que debemos hacer siempre, arrojarnos a la estación que corresponda y vivirla con tal intensidad que llegue a causar envidia a las estrellas del firmamento que nos miren.
Felicitaciones.

víctor

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