Editorial Alaire

Óscar Distéfano escribió:

Caminaba sobre la otra acera

En órbitas absurdas de estrellas indolentes,
como vuelos tardíos del crepúsculo,
la memoria repite
tus ojos aburridos de mirarme.

Ni tu amor ni mi amor
pudieron recobrar su aroma
de humus en el bosque de las sábanas,
buscando resurgir
sobre las olas del recuerdo;
y fríos en sus agonías,
se desataron piel a piel,
de las cadenas oxidadas del deseo.

Aquella tu existencia que amarraba
los momentos tediosos de mi vida,
hoy he visto, con nubes de ternura,
llover sonrisas sobre la otra acera,
como un diluvio ajeno a mi sequía.

Y detuve mi angustia —pájaro
de rotas alas—,
mirándote volar en otro cielo.

No lo había leído y me he dado cuenta que me había perdido un magnífico escrito.

Un abrazo

Alejandro Costa escribió:

No lo había leído y me he dado cuenta que me había perdido un magnífico escrito.

Un abrazo

Te agradezco tu amabilidad para este comentario. Corregir, reflotar, y recibir nuevos comentarios estimulantes a un poema que lleva ya once años de vida, es un gran premio para mi poeta. Me brinda la convicción de que la lucha no ha sido en vano, que algo rescatable queda del esfuerzo de años que vengo realizando. Recuerdo que siempre quise ser poeta, incluso antes de entender la poesía.

Otro abrazo para ti, Alejandro.
Óscar

Óscar Distéfano escribió:

Caminaba sobre la otra acera

En órbitas absurdas de estrellas indolentes,
como vuelos tardíos del crepúsculo,
la memoria repite
tus ojos aburridos de mirarme.

Ni tu amor ni mi amor
pudieron recobrar su aroma
de humus en el bosque de las sábanas,
buscando resurgir
sobre las olas del recuerdo;
y fríos en sus agonías,
se desataron piel a piel,
de las cadenas oxidadas del deseo.

Aquella tu existencia que amarraba
los momentos tediosos de mi vida,
hoy he visto, con nubes de ternura,
llover sonrisas sobre la otra acera,
como un diluvio ajeno a mi sequía.

Y contuve mi angustia —pájaro
de rotas alas—,
mirándote volar en otro cielo.

Tratas con fino lirismo y delicadas imágenes un tema cargado de fuertes emociones y emociones en estado de inercia. Cuando termina el amor y cuando el ser que fue amado inicia una nueva relación, surgen en el poeta las poesias de la despedida. Un placer encontrar éste bello poema hoy, Óscar. ERA