Editorial Alaire

Todo clamor por la justicia tiene valor por sí mismo, la solidaridad al hombre lastimado -ferozmente- por otro hombre
es el último refugio de esperanza en el género... Pero cuando el sentir se expresa como lo has hecho tú,
con tal fuerza y rigor poético, logra mayor trascendencia el clamor y más dulzura la esperanza.
Gracias por tu canto de humana benevolencia. Un afectuoso y estrecho abrazo.

Me ha gustado mucho. Me recuerda a los gritos poéticos de mi ídolo Miguel Hernández.

Es un gran escrito.

Un abrazo.

Guillermo Cuesta escribió:Un consuelo que duele al poeta aunque la realidad no sepa de poesía ni de ánimos prudentes.

un abrazo

Mi agradecimiento, amigo Guillermo, por tus palabras.

Recibe un abrazo.
Felipe.

José Manuel F. Febles escribió:El mensaje queda dicho, y de forma contundente y clara. La poesía también sirve para esta clase de denuncia, cuando sale de la mano de un gran poeta.

Un abrazo, amigo.

José Manuel F. Febles, desde mi isla

Te doy las gracias, José Manuel, por tus amables palabras.

Recibe un abrazo, amigo.
Felipe.

Rafel Calle escribió:Estremecedor y necesario poema de Felipe.

Gracias, Rafael, por tus palabras.

Recibe un abrazo, compañero.
Felipe.

Bellísimo poema, Felipe, las metáforas me parecen extraordinarias...todo esto dicho, me alegra siempre que la poesía necesaria, la canten los poetas y muestren su humanidad como estandarte.
Felicitaciones, querido compañero.

Carmen

Hallie Hernández Alfaro escribió:Sube para deleite de todos.

Gracias, Hallie.

Un cordial saludo.
Felipe.

Felipe Fuentes García escribió:


Llegas de la ceniza. Una pavesa
guarda aún tu solapa de vacío
como vórtice en fuga, y un torrente
se ahoga en llanto sobre tu cintura.

Asciendes los espinos de las horas.
Dos tizones alumbran tu mirada
y sigues avanzando entre raíles
con niebla de una ráfaga de huesos.

¿A dónde tu destino interminable?
¿En qué zarzal se seca tu esperanza?
¿Dónde apagar tu duelo acuchillado?

¡Tantas vidas sangrando a borbotones!
¡Tanto dolor mojado en sus raíces!
¡Tantas fulguraciones de la muerte!

Poeta que concentrada esencia del dolor humano nos haces llegar! Mis respetos, ERA

Gerardo Mont escribió:Con el respeto que me merece un poeta comprometido, sensible y de visión profunda, aplaudo este maravilloso trabajo, que despierta la humanidad en los dormidos. Un gran abrazo.

Muchas gracias, amigo, por tan generoso comentario.

Recibe un gran abrazo.
Felipe.

Un excelente poema, con fuerza en su reivindicación e impecable en su forma. Un abrazo.

Julio Gonzalez Alonso escribió:
¡Qué te voy a decir, Felipe! Un magnífico y doloroso poema, difícil, sin concesiones, demagogias ni distracciones del tema sangrante que recoge en sus versos. Las metáforas, ajustadas y poderosas, son de una hermosura envidiable. Un abrazo.
Salud.

Te doy las gracias, Julio, por tus generosas palabras.
Recibe un abrazo, amigo.
Felipe.

Potentes y estremecedoras imágenes para un hermoso poema digno de tu magnífica pluma. Un lujo presenciarlo.
Un abrazo.
Pepa

Arturo Rodríguez Milliet escribió:Todo clamor por la justicia tiene valor por sí mismo, la solidaridad al hombre lastimado -ferozmente- por otro hombre
es el último refugio de esperanza en el género... Pero cuando el sentir se expresa como lo has hecho tú,
con tal fuerza y rigor poético, logra mayor trascendencia el clamor y más dulzura la esperanza.
Gracias por tu canto de humana benevolencia. Un afectuoso y estrecho abrazo.

Te agradezco mucho tus palabras, Arturo, y la generosidad con que las expresas.

Recibe un gran abrazo, amigo.
Felipe.

Felipe Fuentes García escribió:


Llegas de la ceniza. Una pavesa
guarda aún tu solapa de vacío
como vórtice en fuga, y un torrente
se ahoga en llanto sobre tu cintura.

Asciendes los espinos de las horas.
Dos tizones alumbran tu mirada
y sigues avanzando entre raíles
con niebla de una ráfaga de huesos.

¿A dónde tu destino interminable?
¿En qué zarzal se seca tu esperanza?
¿Dónde apagar tu duelo acuchillado?

¡Tantas vidas sangrando a borbotones!
¡Tanto dolor mojado en sus raíces!
¡Tantas fulguraciones de la muerte!

Impactante y sobrecogedor poema. Un placer de lectura.

Abrazos

Con sensibilidad y fuerza emotiva has puesto el dedo en la llaga de una realidad dolorosa.

Mis aplausos por este solidario y magnífico soneto, Felipe.

Un abrazo.