Víctor F. Mallada escribió:Muy bonito, Carmen; se nota que dominas el ritmo del lenguaje y lo acomodas a ese tu "pensar el mar".
Un placer de lectura.
Víctor
Gracias Victor.
Un placer recibir tus palabras
Saludos
Moderadores: J. J. Martínez Ferreiro, Rafel Calle
Víctor F. Mallada escribió:Muy bonito, Carmen; se nota que dominas el ritmo del lenguaje y lo acomodas a ese tu "pensar el mar".
Un placer de lectura.
Víctor
Gracias José por detenerte en mis letras.Jose Sierra escribió:Hermosísimo poema Carmen mis felicitaciones.
Un Saludo.
¡¡¡ Hermoso poema !!! Mi más sincera enhorabuena.Carmen Pla escribió:Miro el horizonte y lo distingo azul,
miro más allá y sólo veo grises
como si me confirmara que;
más allá del saber, del conocimiento
y de la propia experiencia,
reina la sabia duda,
y yendo adelante, tan solo caminar,
sobre un remanso de una paz insistente
donde se queda quebrada la estela del barco,
que encara la mar orgulloso.
Su proa maniobrando zanjas blancas,
su popa dejando blandas huellas,
y en una constante desembocadura
con su efímera espuma,
se queda la estrella anclada,
a la izquierda las olas me dicen:
al límite de los esfuerzos voy,
blancos una y otra vez
que ya se que es lo mismo,
pero refrescan mi memoria y mis pies,
en esa luz navegante que surcó el mar,
el tapiz dorado y pensar...
la luz que no apagó la tempestad.
Soy de mar, mi mirar fijé en el horizonte azul,
ven hacía mi reguero de los cielos
y asienta en él tu espacio,
escucha a las nacientes mariposas
desnudarse ante el sol en su cama de arena,
que un amor prende en sus olas
custodian el cielo
ahuyentan el miedo y dilatan el mar.
José Manuel F. Febles escribió:Un hermoso poema donde la cadencia y el ritmo se hace notar en cada verso. Dominas la palabra y es esencial para poder escribir tan excelentemente como tú lo haces.
Un abrazo hasta Valencia.
José Manuel F. Febles, desde mi isla
Begoña Egüen escribió:¡¡¡ Hermoso poema !!! Mi más sincera enhorabuena.Carmen Pla escribió:Miro el horizonte y lo distingo azul,
miro más allá y sólo veo grises
como si me confirmara que;
más allá del saber, del conocimiento
y de la propia experiencia,
reina la sabia duda,
y yendo adelante, tan solo caminar,
sobre un remanso de una paz insistente
donde se queda quebrada la estela del barco,
que encara la mar orgulloso.
Su proa maniobrando zanjas blancas,
su popa dejando blandas huellas,
y en una constante desembocadura
con su efímera espuma,
se queda la estrella anclada,
a la izquierda las olas me dicen:
al límite de los esfuerzos voy,
blancos una y otra vez
que ya se que es lo mismo,
pero refrescan mi memoria y mis pies,
en esa luz navegante que surcó el mar,
el tapiz dorado y pensar...
la luz que no apagó la tempestad.
Soy de mar, mi mirar fijé en el horizonte azul,
ven hacía mi reguero de los cielos
y asienta en él tu espacio,
escucha a las nacientes mariposas
desnudarse ante el sol en su cama de arena,
que un amor prende en sus olas
custodian el cielo
ahuyentan el miedo y dilatan el mar.
Un abrazo.
BEGOÑA.