Editorial Alaire

Manuel Alonso escribió:Pobre cuerpo, ahora deshabitado,
Metido entre otras cosas,
Ladrillos por ejemplo
Rojos de mi tierra.

Y pobre alma, ya desasistida,
Vagando por ahí, dando tumbos.

No sé la razón
De por qué escribo esto,
Mirando la tele,
Con los cascos puestos,
Como si nada.

Es la sencillez y la autenticidad de tus letras las que atrapan, Manuel.
Un placer leerte.
Abrazo

Manuel Alonso escribió:Pobre cuerpo, ahora deshabitado,
Metido entre otras cosas,
Ladrillos por ejemplo
Rojos de mi tierra.

Y pobre alma, ya desasistida,
Vagando por ahí, dando tumbos.

No sé la razón
De por qué escribo esto,
Mirando la tele,
Con los cascos puestos,
Como si nada.

Conciencia de uno mismo, me gusta mucho este poema que pausa para poetizar el momento. Ese es poeta y su mistificación. Un abrazo, Manuel. ERA

Un poema de enorme belleza, Manuel. Humanista, desnudo, profundo.
Se traslada completo, la imagen se fija nítida.
Un placer leerte, amigo
Fuerte abrazo

Como si nada, no, como si mucho! pues cuando estas reflexiones nos llenan el espacio circundante es porque tienen necesidad de salirse de sus límites, ponerse en palabras el espíritu y hacer pasar por cedazo el alma... necesaria contrición. Coloquial y sencillo, como la vida misma.... me ha gustado poeta... Felicidades. Manuel

un gran abrazo

Mitsy

Gracias Guillermo, un abrazo, amigo.

Ignacio, muchas gracias, amigo.

Gracias Oscar, un abrazo, amigo.

Gracias Armilo, un abrazo, amigo.

Hola Pablo, muchas gracias por el comentario, un abrazo y un culin de sidra.

Manuel Alonso escribió:
Pobre cuerpo, ahora deshabitado,
Metido entre otras cosas,
Ladrillos por ejemplo
Rojos de mi tierra.

Y pobre alma, ya desasistida,
Vagando por ahí, dando tumbos.

No sé la razón
De por qué escribo esto,
Mirando la tele,
Con los cascos puestos,
Como si nada.

Así, como si nada, yo te imagino mirando la tele, con los cascos puestos, sí.
Y es que hay veces que la tele sólo nos deja imágenes de cuerpos deshabitados y sus almas desasistidas ¿a dónde irán?
Son instantaneas que duelen y esa es la razón, lo es, de que así, como si nada, nos hayas dejado esta impronta espontanea y magnífica.
Felicidades amigo Manuel.

Un fuerte abrazo.

Pepa, muchas gracias, amiga, un abrazo.

Gracias, un abrazo, amiga Carmen.

Un hermoso y profundo poema, tan real y cotidiano que cala hondo. Un gustazo volverte a leer. Un abrazo amigo.

Gracias ERA, un abrazo, amiga.

Me ha gustado mucho esta crónica escueta pero profunda de un instante con el que cualquiera se puede sentir identificado.

Un abrazo