Editorial Alaire

Ramón Carballal escribió:Hermosa reflexión vital. Un placer la lectura. Abrazos.

Se te agradece, poeta. Tu visita es un honor para mí. Gracias.

Abrazos.
Óscar

Óscar Distéfano escribió:
Comprender la realidad

Va el color diluyéndose en la tarde de otoño
como el lamento cúspide de un saxo.
Tal vez una llovizna está cayendo afuera,
tal vez a mi alma cubra la dimensión de la tristeza.

Hace tiempo cerré mis ociosas ventanas,
y casi he olvidado el agua en mi yermo sin pájaros,
en mi jardín rendido,
en las lluvias de frías primaveras.

Toda la inmensidad de la noche a mi alcance,
sin embargo no alcanza
para esta mano que expone su insistencia,
para huir de los buitres del desastre.

Los grillos desistieron de herirme los oídos,
y abandoné por siempre la casa de la infancia.
He cruzado la imagen de mis muertos,
y he olvidado las risas de mis putas tristes.

El tiempo se hizo brújula de mi viaje forzoso,
y fatalmente me aproxima
a la dura mentira de la aurora,
al escarmiento de la luz.

Es un poema soberbio a mas no poder. Te felicito, Oscar de principio a fin el poema sabe al son quejumbroso y bello del blue...ERA

Y quien no admira a Oscar,!!!!, esa realidad, que ni si quiera se bien si existe se desparrama de forma casi mística por tus versos, componiendo una obra obra de arte en las dos ultimas estrofas.

Mil gracias y mil besos

Curra

Manuel Alonso escribió:Brillante Óscar, un hermoso poema que anda el camino de la vida. Un abrazo amigo.

Gracias, Manuel. Un lujo tu visita.

Un abrazo.
Óscar

Todo yace en ese título. Es una introducción que confirma este adagio, este puente ubérrimo a la nostalgia y las huellas. Atravesarlo es discurrir castillos como sueños que se van desmoronándose con la lluvia, una lluvia que son las lágrimas que gotean el tiempo, al abandonar la plenitud, y que recoge la escudilla de la sabiduría, que maciza y bien conformada, nutre el paso y sin saberlo, el futuro.
Precioso, sincero, íntegro...la luz, en su escarmiento, dejó seguro resplandores de su paso en estos versos
Fuerte abrazo amigo

Impecable "crónica" poética. Un abrazo, Óscar.

Ignacio

Muy bello poema. Hay destellos de originalidad y humanidad por todas partes..., esos que hacen de un poema una versión del hombre, de su dolor, alegría u otro sentimiento, pero con voz propia. Hay una simbología que condensa toda una experiencia de vida. Cierre genial (jamás lo había leído o lo recordaría), que condensa toda una realidad e invita a la reflexión mientras se hurga en sus rincones. Un gran abrazo.

Óscar Distéfano escribió:
Comprender la realidad

Va el color diluyéndose en la tarde de otoño
como el lamento cúspide de un saxo.
Tal vez una llovizna está cayendo afuera,
tal vez a mi alma cubra la dimensión de la tristeza.

Hace tiempo cerré mis ociosas ventanas,
y casi he olvidado el agua en mi yermo sin pájaros,
en mi jardín rendido,
en las lluvias de frías primaveras.

Toda la inmensidad de la noche a mi alcance,
sin embargo no alcanza
para esta mano que expone su insistencia,
para huir de los buitres del desastre.

Los grillos desistieron de herirme los oídos,
y abandoné por siempre la casa de la infancia.
He cruzado la imagen de mis muertos,
y he olvidado las risas de mis putas tristes.

El tiempo se hizo brújula de mi viaje forzoso,
y fatalmente me aproxima
a la dura mentira de la aurora,
al escarmiento de la luz.

Me gustan los poemas que te dejan pensando.

Las imágenes me parecen muy expresivas.

Un placer leerte, Óscar.

Abrazo

Óscar Distéfano escribió:
Comprender la realidad

Va el color diluyéndose en la tarde de otoño
como el lamento cúspide de un saxo.
Tal vez una llovizna está cayendo afuera,
tal vez a mi alma cubra la dimensión de la tristeza.

Hace tiempo cerré mis ociosas ventanas,
y casi he olvidado el agua en mi yermo sin pájaros,
en mi jardín rendido,
en las lluvias de frías primaveras.

Toda la inmensidad de la noche a mi alcance,
sin embargo no alcanza
para esta mano que expone su insistencia,
para huir de los buitres del desastre.

Los grillos desistieron de herirme los oídos,
y abandoné por siempre la casa de la infancia.
He cruzado la imagen de mis muertos,
y he olvidado las risas de mis putas tristes.

El tiempo se hizo brújula de mi viaje forzoso,
y fatalmente me aproxima
a la dura mentira de la aurora,
al escarmiento de la luz.

He disfrutado con tu hermoso poema, Óscar. La eufonía que procura ese ritmo de imparisílabos y sus combinaciones y que tan acertadamente empleas en tu composición, y ese lenguaje fuera de todo cripticismo me han arrastrado desde el principio. El tema es hondo y universal. Me transmite la percepción sicológica de la "flecha" vital del tiempo, la dimensión que nos cobija, que nos sostiene y a la vez nos consume, como luminosa llama de un fuego que se entrega (y nos aboca) a su propia y paulatina extinción, negándonos -ya en ella- la aurora en ese "escarmiento de la luz".

Recibe un gran abrazo, amigo.
Felipe.

Muy bello poema de Óscar.

Profundo, lleno de fuerza expresiva querido amigo...conmovedor...
Muy grato leerte...te abrazo con todo mi cariño...
Nancy