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Re: La identidad desvaída

Publicado: Mié, 21 Oct 2015 22:38
por Begoña Egüen
Ramón Carballal escribió:Es extraño que aún me pregunte quién soy.

Después de la convivencia con este cuerpo,
después de domar la razón con escrúpulos rojos
o fantasear con episodios improbables de salvación.

No,
mira en el espejo de tu mansedumbre,
perfil que los horarios han pulido,
la escarpia que te une al yugo de la rutina
y no te deja prolongar los brazos abiertos
hacia un sur de escamas.

Aún escribes frases de omnipotencia,
tus oasis dan miedo,
tus escaleras cansancio,
en el suburbio de ti vive un ángel derrotado
al que no veneras.

Pero los pilares exigen dosis de buenaventura,
a pesar de tus ejes, en el silencio de la inquietud
porque piensas en el hijo
y en los sueños
que no le amparan.

Nunca serás tú
aunque amargamente te refugies
en la simpatía del cristal,
aunque un vaho sin escribir
dibuje tu forma de nubes iluminadas
por auroras imposibles.

Hay un orden en el desorden,
hay verdades que se ocultan
(o mueren recién nacidas)
para perpetuar este ciclo insomne
que nos explica.

Asume pues la estratagema
y vive el espectáculo de un presente de esperanzas
en tus manos agrias,
en tu verdor de insolencia.
Bellísimo poema. Gracias , por haber compartido.
Un abrazo.
BEGOÑA.

Re: La identidad desvaída

Publicado: Jue, 22 Oct 2015 11:40
por Guillermo Cumar.
Así de complicado es seguir el paso a paso de la vida y atreverse a entrar en el sentir del propio corazón.
El verso reclama un toque de verbo fácil para que el poema reclame vida propia.

un abrazo

Re: La identidad desvaída

Publicado: Jue, 22 Oct 2015 19:40
por E. R. Aristy
Ramón Carballal escribió:Es extraño que aún me pregunte quién soy.

Después de la convivencia con este cuerpo,
después de domar la razón con escrúpulos rojos
o fantasear con episodios improbables de salvación.

No,
mira en el espejo de tu mansedumbre,
perfil que los horarios han pulido,
la escarpia que te une al yugo de la rutina
y no te deja prolongar los brazos abiertos
hacia un sur de escamas.

Aún escribes frases de omnipotencia,
tus oasis dan miedo,
tus escaleras cansancio,
en el suburbio de ti vive un ángel derrotado
al que no veneras.

Pero los pilares exigen dosis de buenaventura,
a pesar de tus ejes, en el silencio de la inquietud
porque piensas en el hijo
y en los sueños
que no le amparan.

Nunca serás tú
aunque amargamente te refugies
en la simpatía del cristal,
aunque un vaho sin escribir
dibuje tu forma de nubes iluminadas
por auroras imposibles.

Hay un orden en el desorden,
hay verdades que se ocultan
(o mueren recién nacidas)
para perpetuar este ciclo insomne
que nos explica.

Asume pues la estratagema
y vive el espectáculo de un presente de esperanzas
en tus manos agrias,
en tu verdor de insolencia.

Un espejo que se rompe hiriendo una que otra cosa, se rompe toda ilusión y fantasía, entonces queda un hombre de espaldas a los caprichos de las percepciones del mundo. Queda un poema extraordinariamente hermoso y poderoso como este. Un abrazo, Ramón. ERA

Re: La identidad desvaída

Publicado: Vie, 23 Oct 2015 12:28
por Ignacio Mincholed
Impecable, Ramón.

Un abrazo.
Ignacio

Re: La identidad desvaída

Publicado: Vie, 23 Oct 2015 13:12
por Ramón Carballal
Ricardo Serna G escribió:Ramón


POETA CON MAYÚSCULA


Un abrazo fuerte, querido maestro
Gracias por tu generosidad, Ricardo. Un abrazo.

Re: La identidad desvaída

Publicado: Vie, 23 Oct 2015 13:15
por Ramón Carballal
Guillermo Cuesta escribió:Si nos ponemos a pensar hacia adentro vemos que un montón de razones se convierten en carencias de
uno mismo como ser, como persona y hasta como poeta.
De la introspección sale la duda y de esta siempre alguna mala o buena deducción.

un abrazo
Gracias, Guillermo, por leerme y comentar. Un abrazo.

Re: La identidad desvaída

Publicado: Vie, 23 Oct 2015 13:16
por Ramón Carballal
Felipe Fuentes García escribió:
Ramón Carballal escribió:Es extraño que aún me pregunte quién soy.

Después de la convivencia con este cuerpo,
después de domar la razón con escrúpulos rojos
o fantasear con episodios improbables de salvación.

No,
mira en el espejo de tu mansedumbre,
perfil que los horarios han pulido,
la escarpia que te une al yugo de la rutina
y no te deja prolongar los brazos abiertos
hacia un sur de escamas.

Aún escribes frases de omnipotencia,
tus oasis dan miedo,
tus escaleras cansancio,
en el suburbio de ti vive un ángel derrotado
al que no veneras.

Pero los pilares exigen dosis de buenaventura,
a pesar de tus ejes, en el silencio de la inquietud
porque piensas en el hijo
y en los sueños
que no le amparan.

Nunca serás tú
aunque amargamente te refugies
en la simpatía del cristal,
aunque un vaho sin escribir
dibuje tu forma de nubes iluminadas
por auroras imposibles.

Hay un orden en el desorden,
hay verdades que se ocultan
(o mueren recién nacidas)
para perpetuar este ciclo insomne
que nos explica.

Asume pues la estratagema
y vive el espectáculo de un presente de esperanzas
en tus manos agrias,
en tu verdor de insolencia.
Un gran poema, Ramón. Me ha encantado leerte, amigo.

Recibe mi aplauso con un abrazo.
Felipe.
Gracias, Felipe, por tus generosas palabras. Un abrazo.

Re: La identidad desvaída

Publicado: Vie, 23 Oct 2015 16:22
por Ramón Carballal
Julio Gonzalez Alonso escribió:Siempre un placer leerte. Enhorabuena.
Salud.
Muchas gracias, Julio, por leerme y hacerme saber tu paso. Un abrazo.

Re: La identidad desvaída

Publicado: Vie, 23 Oct 2015 16:23
por Ramón Carballal
Óscar Distéfano escribió:Excelente poema, Ramón. Realmente, ha sido un enorme placer leerte. Mucha emoción.

Un abrazo de amistad.
Óscar
Gracias, Óscar, por tu lectura y amables palabras. Un abrazo.

Re: La identidad desvaída

Publicado: Vie, 23 Oct 2015 16:24
por Ramón Carballal
Pablo Ibáñez escribió:Arriba.

Como siempre, un gran poema, Ramón. Me da la impresión que estás explorando otros registros, tanto en fondo como en forma, a los que habitualmente practicas, Y todos ellos los manejas con gran criterio, lo que demuestra, a mi entender, tu talento. En esta ocasión destacaría los encabalgamientos, que me han parecido muy "poéticos". A veces en tus poemas los encabalgamientos resultan más "prosaicos", más tipo versículo, aquí has practicado en encabalgado "alaire" con gran calidad

en el suburbio de ti vive un ángel derrotado
al que no veneras.

Me gusta mucho la manera como planteas el tema de la identidad, entreverada con el paso del tiempo y el recuerdo.

Un abrazo.
Gracias, Pablo, por la lectura y el comentario que me dejas. Un abrazo.

Re: La identidad desvaída

Publicado: Vie, 23 Oct 2015 16:24
por Ramón Carballal
Lunamar Solano escribió:Profundo y muy bello querido amigo...
Un gusto siempre...te abrazo con todo mi cariño...
Nancy
Muchas gracias, Nancy. Un abrazo.

Re: La identidad desvaída

Publicado: Vie, 23 Oct 2015 16:25
por Ramón Carballal
Pilar Morte escribió:Magnífico, Ramón, lo he leído varias veces y en cada una encuentro un rincón sin explorar. Eres un lujo.
Besos
Pilar
Gracias por tu amabilidad, Pilar. Un beso.

Re: La identidad desvaída

Publicado: Vie, 23 Oct 2015 16:25
por Ramón Carballal
Carmen Pla escribió:Amigo Ramón, nunca decepciona tu poesía, tiene ese brillo particular que hace llegar, envolver y engrandar.

Precioso poema de una intimidad desbordante.

Un fuerte abrazo, poeta.
Gracias, Carmen, eres muy amable. Un fuerte abrazo.

Re: La identidad desvaída

Publicado: Vie, 23 Oct 2015 16:26
por Ramón Carballal
Ana Muela Sopeña escribió:Enhorabuena, Ramón, por este poema bellísimo, lleno de alma y Poesía con mayúsculas.

Besos
Ana
Muchas gracias, Ana. Besos.

Re: La identidad desvaída

Publicado: Vie, 23 Oct 2015 16:27
por Ramón Carballal
Begoña Egüen escribió:
Ramón Carballal escribió:Es extraño que aún me pregunte quién soy.

Después de la convivencia con este cuerpo,
después de domar la razón con escrúpulos rojos
o fantasear con episodios improbables de salvación.

No,
mira en el espejo de tu mansedumbre,
perfil que los horarios han pulido,
la escarpia que te une al yugo de la rutina
y no te deja prolongar los brazos abiertos
hacia un sur de escamas.

Aún escribes frases de omnipotencia,
tus oasis dan miedo,
tus escaleras cansancio,
en el suburbio de ti vive un ángel derrotado
al que no veneras.

Pero los pilares exigen dosis de buenaventura,
a pesar de tus ejes, en el silencio de la inquietud
porque piensas en el hijo
y en los sueños
que no le amparan.

Nunca serás tú
aunque amargamente te refugies
en la simpatía del cristal,
aunque un vaho sin escribir
dibuje tu forma de nubes iluminadas
por auroras imposibles.

Hay un orden en el desorden,
hay verdades que se ocultan
(o mueren recién nacidas)
para perpetuar este ciclo insomne
que nos explica.

Asume pues la estratagema
y vive el espectáculo de un presente de esperanzas
en tus manos agrias,
en tu verdor de insolencia.
Bellísimo poema. Gracias , por haber compartido.
Un abrazo.
BEGOÑA.
Gracias, Begoña. Me alegra que te haya gustado el poema. Un abrazo.