Editorial Alaire

Pilar Morte escribió:¿Cómo son los poemas sanadores del dolor
de qué luz arrebatan el rayo,
de dónde la escarcha para humedecer las lágrimas que se secaron
de tanto recorrido, dejando un rastro amargo?.

Eran barcos con las mejores velas,
surcaban al alba sin miedo a la corriente,
y han ido zozobrando casi al mismo tiempo
abandonando sus voces en la bruma
sin poder detener el tiempo de la huida.

Me pregunto:
Quién levantó la boca magna de las olas
que los fue devorando a un tiempo
y dejó destruidos los camarotes de la vida
y desoladas las camas compartidas.

Llegaron a la playa almas sobre algas transparentes,
y el ánimo de muchos corazones apagados.

Fue demasiada la tempestad y dolor de ruinas
que lloró el cementerio.

Juntas, todas juntas agitan mi pecho,
y una tristeza que no termina
viste de noche los párpados.

Por eso quiero un poema sanador,
un pensamiento luminoso,
una candela para la penumbra.

Manuel Sánchez escribió:Pilar, he pasado por tu poema y ha sido un placer su lectura. Su aire, su tratamiento.......

Un fuerte abrazo.