Ventura Ramos López escribió:...
¿La viste?
Se quedó sin ojos, y empezó
a chocar contra la intemperie.
Su piel había cambiado,
lástima esas muescas
de crueldad
en el nácar de su roce en cautela.
Sus diminutos pasos de geisha
solían llevar al futuro.
Yo la he visto andar sola,
con su abrigo gris empapado bajo la lluvia,
arañando las aceras, serpenteando
sus derrotas, marcada
con el pecado original a cuestas.
Entre sus manos, asomando,
un rojo corazón de niña buena
bombea sus ternuras, irrigando
una sencilla esperanza, que de un soplo
resucitara, virginal, a la Conciencia.
.
.
.
Espectacular poema que toca la fibra, amigo Ventura, y giramos la mirada intentando creer que no existen esas realidades que nos rodean y cada vez son más frecuentes.
He empezado a resaltar versos pero este poema es indivisible, como dice Óscar merece la estrella tanto como el anterior.
Una joya y un placer leerte, amigo.
Abrazos y felicidades.