Marius Gabureanu escribió:Es extraordinario el poema, amigo Ventura, por toda esa carga emocional, por los sueños que van adquiriendo fortaleza a cada palabra, por hacer del hombre un indice de amor. Pasa que yo tengo una hija, Antonella se llama, de ocho años. Hace poco salí con ella de compras. Me pidió un vestido de Cleopatra, porque en el colegio estudiaba la historia egipcia. No lo encontré, amigo, y claro, no se lo pude comprar. La impotencia es el ojo de una espina. Por eso, amigo Ventura, digo que aquí, en estos versos, he recuperado la confianza. Te lo agradezco.
Es tan bonito esto que me dices Marius, tan bonito. Es un comentario maravilloso, y no quisiera agregar muchas palabras, sólo que habla mucho de tí, de ese alma que nos dejas ver y que aquí me has regalado de una manera tan generosa y tierna. Mucho me regalas con estas palabras, y yo te lo agradezco enormemente. Beso grande a Antonella (precioso nombre, por cierto)
Un fortísimo abrazo