Editorial Alaire

El alma y su fragilidad, los muros y la ciudad donde se encierra un pensamiento, Has escrito un poema con belleza y elegancia,

Ventura Ramos López escribió:...

Transparente, agua en colina, fragua albar. Se alza
en espumas de un sueño cavilado entre balcones al horizonte de una fe blanca,
la ciudadela vidriada, antítesis de espejos, donde todo traspasa
sin herir la mirada, una Alhambra esculpida de lagrimas
no vertidas, en habitaciones habitadas a 21 gramos salpicando la mañana.

Vibra, toda una, como una cuerda al aire de arpa, acariciando
las caderas de la calma. La recorren todos los susurros
soplados al oído en ardientes instantes, cual palomas en llamas,
germinando almenas en guirnaldas
de tan encendidos, potestad de las ventanas que atesoran incandescentes adioses,
alumbrando en ascenso sus cuellos de azúcar, balanceándose
en minaretes de argentados amarantos, cual linternas en el aire que la abraza.

Inmensa en su fragilidad, se diluyó lechosa ese día
en el que un óxido de desconfianza se filtro a sus níveos muros,
sembrando un parpadeo continuo a la desesperanza.

Difícil beberse un caldo de Luna
con unos ojos sin alma.
.
.
.

Me parece una búsqueda integral, Ventura, admitir una estructura compacta y suave, y a la vez la residencia de la fuerza humana y sobre humana. Te felicito por un poema de belleza profunda y sugerente de lo esencial. Abrazos, ERA

José Manuel F. Febles escribió:Excelente poema, de una inspiración suprema. Un sensible recorrido que me ha llegado.
Felicitaciones. Un cordial abrazo.

José Manuel F. Febles

Estimado Jose Manuel, es un placer recibir tu palabra generosa, cuanto me alegra lo que me dices.
Un fuerte abrazo compañero

F. Enrique escribió: El alma y su fragilidad, los muros y la ciudad donde se encierra un pensamiento, Has escrito un poema con belleza y elegancia,

¿Sabes? tengo demasiadas ganas como para no preguntarte que significa la F...te siento cercano amigo, reconozco tu sinceridad que flota empujada por tus remos en un mar que no siempre quiere ser navegado. Yo entiendo esos impulsos por que sino, ¿cómo llegar a la otra orilla? No dejes de zarpar con esa humanidad que tanto trae.
Gracias por pasarte, por venir y leerme de forma generosa, un abrazo

Me ha gustado mucho recorrer esta ciudad de cristal en la sensibilidad de tus versos, amigo Ventura.
Felicidades por este hermoso poema, compañero.
Fuerte abrazo.