Editorial Alaire

Bruno Laja escribió:
Para mí es muy bello, es muy bello el halllar en un poema el hielo, el frío como un germen de bondad, hasta de sacrificio. Le das una temperatura exenta de signo al tacto de quien palpa lo oscuro y no se amedranta, aprieta los ojos y suelta las manos. Un placer de lectura, Marisa. Abrazos.

Virginia Nas escribió:
Pues yo, que soy una amante de lo concreto siempre encuentro una genialidad entre tus versos, de esas que me gusta adoptar para mi léxico cotidiano
*que enciende la luz agitando las sombras entre sus manos.*
Será por eso que me parece tan brillante este verso?

Manuel Sánchez escribió:
Un poema libre, dejado a su antojo, conduciendo tu sensibilidad y mostrando la poesía que hay en ti, Marisa. Un gran placer leerte, amiga.
Un fuerte abrazo.

F. Enrique escribió: Me ha gustado mucho dejarme llevar por tu propuesta, Marisa. Quizás la poesía necesite el convencimiento de aquellos que la necesitan para seguir viviendo, quizás queden faros que brillen en a la luz del día y que muestren los bares y las esquinas a las almas que vagan rimando la noche. Debemos mirar siempre hacia el rincón donde muere la poesía que nace como un impulso espontáneo de las ganas de vivir, como una rebeldía radical contra la apatia de las horas ahogadas en una corriente de asfalto.

Un abrazo.

CELIA PUERTA escribió:......................
En la oscuridad hay un farero poeta
que enciende la luz agitando las sombras entre sus manos.
Amados y exclusivos pirómanos del hielo
que ahuyentan la soledad y el miedo.

Muy hermoso, Marisa.

Un abrazo.

Carmen López escribió:
Es delicioso, Marisa, ya lo he leído 3 veces, siempre que he ido a comentar sonaba mi teléfono y eran cosas de trabajo, así que lo he dejado para un ratito (como éste) en que pudiera estar por él.
Me encanta el título ese contraste es bellísimo, una hermosura, los contrarios creando un todo comprensible, poético y bello, es delicioso.
El desarrollo me encanta y del final qué voy a decir...

En la oscuridad hay un farero poeta
que enciende la luz agitando las sombras entre sus manos.
Amados y exclusivos pirómanos del hielo
que ahuyentan la soledad y el miedo.

Una delicia para los sentidos, para los sentires.

Un montón (te los has ganado todos) de abrazos.

Carmen

Carlos Justino Caballero escribió:Marisa Peral, Son almas que esperan juntas y expectantes
-sin remordimientos-
alados navegantes de huellas borradas, espejos de plata.

Belleza en letras con imágenes estupendas que he tenido el privilegio de leer. Mi afecto, poeta!

Manuel Sánchez escribió:Pues a mí me parece que aquí hay muchos lectores y además entusiastas......será que la autora merece la pena no?

Un abrazo, Marisa. El poema me ha gustado mucho, amiga.