LUIS MARIÑO escribió:Un poema precioso y de una sensibilidad exquisita, Liz. Me encantó leerte amiga. Mis felicitaciones y un abrazo.
Uff, eres muy amable, Luis, te agradezco de corazón el haberme leído.
Un beso y un abrazo
Moderadores: J. J. Martínez Ferreiro, Rafel Calle
Víctor F. Mallada escribió:Dejas aquí todo un placer para los sentidos, Liz. Poesía total, letras hermosas y una música suave para que la imaginación acabe haciendo el resto.
Un abrazo,
Víctor
Mitsy Grey escribió:El juego del azar, de la vida y de la muerte y la impotencia ante el devenir,
son elementos cruciales, obstáculos que debemos sortear para llegar al punto
final, o meta de la cerrera del vivir... y así llegamos, viejos, desvencijados, medios muertos en vida, resignados de tanto dar golpes contra el aire. Un poema
sustancioso que da para muchas cavilaciones, ésta es la mía... seguro
habrá miles más, aparte de la tuya liz, que a lo mejor ni cioncide con la mía,
pero que ha dado pie a tu escrito, vaporoso.
Mi enhorabuena.... y un abrazo, Mitsy, gracias, por visitar mis letras.
Un poema enorme, Liz. Y los dos versos finales imprescindibles.Liz Barrio. escribió:
Porque la red es invisible y tiene huellas del tiempo donde inmortales los nudos,
parecen no querer dormir. Allá en el vidrio barnizado, se besan los dioses tristes
y cuando su latido acelera, dos manos silencian la flor, la rústica conciencia aletargada.
Puede que todas las razones sean las primeras en la fila. Tal vez los hilos fríos lloraron
y se han acurrucado, buenamente, en un silencio profundo y distinto…
pero nadie puede decir por qué la suerte dobló la esquina y luego, inerte,
un colibrí apareció muerto después del terremoto.
Tengo las manos cerradas, la historia ocurriendo, el aliento desnudo….
Y el viento reciclado, silbando silencios.