Ventura Morón escribió:...
Se le han salido dos perchas
al armario,
insolentes, ¡se asoman a mí!,
una falda y camisa de rayas,
ligerísimas promesas
de tus curvas a venir.
Tan castas, augurio son de roces,
bandera de bienvenida
aquietada,
velamen de un navío vacante
que aguardara un vendabal.
En ayuno, van tus ropas huecas
y mi corazón adentro,
escondido,
varado entre pliegues, como un niño
que confíara - en ansiosa espera-
en la dicha de la vuelta.
Solo dos perchas
y en su pender sencillo,
sin aspavientos,
mi aliento y mis latidos.
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Hermoso poema, Ventura, original y sugerente de la desnudez y de los vestuarios que nos cubren. Un abrazo, ERA