Publicado: Lun, 10 Feb 2014 14:13
Un poeta con mayúsculas Jerónimo un placer pasar por tu poema, gran lirismo,
javier
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Rosa Marzal escribió:Es inútil correr delante de las bestias
con la melancolía enredada en las piernas
y el pecho transparente.
Yo también creo que es inútil correr, mejor hacerse invisible y dejar que pasen de largo. Has definido magistralmente a estos especímenes. Mis aplausos a tu gran talento, amigo Jerónimo. Abrazos.
Carmen López escribió:Me gustó el final del poema, mucho, sin duda no hay nada como sentarse a contemplar la soledad de uno, que muchas veces nos acerca al verso. Un placer.
Abrazos.
Carmen
javierdicenzo80 escribió:Un poeta con mayúsculas Jerónimo un placer pasar por tu poema, gran lirismo,
javier
José Manuel F. Febles escribió:Sin duda alguna, este poema desnuda con la categoría que su autor le confiere, a los "supuestos" líderes de la poesía, a los que miran por encima del hombro, dándose cuenta exacta de que existen otros poetas de grandísima calidad. Como bien dices lo mejor es ignorarlos, porque al fin la vida pone a cada uno en el lugar que le corresponde.
Un enorme poema, cuya entrega nos hace felices de encontrar en este Foro, poetas del más alto prestigio en la actual poesía. Gracias, mi querido amigo, Jerónimo, por dejar a nuestro alcance esta joya poética.
Un gran abrazo desde México.
José Manuel F. Febles
Marius Gabureanu escribió:Estimado amigo, es un poema excelente y sentido, una buena critica. En el mundo del poema, hay de todos. Los pedazos de sombra de cada uno son, tal vez, los versos nunca escritos. Abrazos y felicitaciones sinceras.
jorge muñoz escribió:Jerónimo. Una fina ironía ensalza tu poema, contra los poetas del Olimpo, que creen saberlo todo. Un abrazo.
PD: algo por el estilo es mi última entrega al foro.
Ramón Carballal escribió:Independientemente de la acertada crítica a la vanidad literaria, el poema me parece un ejemplo de maestría por su construcción y por cómo el autor dice lo que quiere decir con las palabras precisas. Mi felicitación y un abrazo.
Jerónimo Muñoz escribió:POETAS AJENOS. 2.- Golondrinas consagradas (EB)
Me dan miedo los toros de frenéticas babas,
que se disfrazan con esparto
y plumas de oxidadas golondrinas .
Sentado en el otero,
los veo aproximarse con sus cuernos envueltos
en trinos de insolente tolerancia.
Es entonces que el miedo me aprisiona
y añoro las alcobas en las que sólo el sueño
consigue penetrar por las rendijas.
Cuando veo que vienen hacia mí
los jactanciosos hijos del exceso,
me escondo en la espesura y les permito
encarnizarse con mi sombra.
Es inútil correr delante de las bestias
con la melancolía enredada en las piernas
y el pecho transparente.
Por eso yo me escondo
de esos toros-poetas consagrados
cuando los veo venir con sus lenguas de sílice
y su belfo apretado por la necesidad
de abatir todo lo que sobresalga.
Después, cuando se han ido,
recojo los pedazos de mi sombra
y los aprieto fuerte contra mi corazón.
Y me siento otra vez en el otero,
y contemplo la soledad,
que es anchurosa y fresca, y me deja existir.
Publico este poema (y otros que seguirán) con una súplica: que nadie de este foro se sienta aludido. Las vivencias que, lejanamente, inspiraron estos poemas, signados con (EB), son completamente ajenas al foro.
Felipe Fuentes García escribió:Jerónimo Muñoz escribió:POETAS AJENOS. 2.- Golondrinas consagradas (EB)
Me dan miedo los toros de frenéticas babas,
que se disfrazan con esparto
y plumas de oxidadas golondrinas .
Sentado en el otero,
los veo aproximarse con sus cuernos envueltos
en trinos de insolente tolerancia.
Es entonces que el miedo me aprisiona
y añoro las alcobas en las que sólo el sueño
consigue penetrar por las rendijas.
Cuando veo que vienen hacia mí
los jactanciosos hijos del exceso,
me escondo en la espesura y les permito
encarnizarse con mi sombra.
Es inútil correr delante de las bestias
con la melancolía enredada en las piernas
y el pecho transparente.
Por eso yo me escondo
de esos toros-poetas consagrados
cuando los veo venir con sus lenguas de sílice
y su belfo apretado por la necesidad
de abatir todo lo que sobresalga.
Después, cuando se han ido,
recojo los pedazos de mi sombra
y los aprieto fuerte contra mi corazón.
Y me siento otra vez en el otero,
y contemplo la soledad,
que es anchurosa y fresca, y me deja existir.
Publico este poema (y otros que seguirán) con una súplica: que nadie de este foro se sienta aludido. Las vivencias que, lejanamente, inspiraron estos poemas, signados con (EB), son completamente ajenas al foro.
Estimado y admirado Jerónimo:
Un poema enorme, a mi modo de ver, eufónico, dotado de la palabra justa y con un desarrollo "coherente" de su fondo, una reflexión-denuncia más que pertinente. Los seis últimos versos son, sencillamente, antológicos.
Mi aplauso y gratitud por compartirlo, amigo.
Recibe un gran abrazo.
Felipe.
Jerónimo Muñoz escribió:POETAS AJENOS. 2.- Golondrinas consagradas (EB)
Me dan miedo los toros de frenéticas babas,
que se disfrazan con esparto
y plumas de oxidadas golondrinas .
Sentado en el otero,
los veo aproximarse con sus cuernos envueltos
en trinos de insolente tolerancia.
Es entonces que el miedo me aprisiona
y añoro las alcobas en las que sólo el sueño
consigue penetrar por las rendijas.
Cuando veo que vienen hacia mí
los jactanciosos hijos del exceso,
me escondo en la espesura y les permito
encarnizarse con mi sombra.
Es inútil correr delante de las bestias
con la melancolía enredada en las piernas
y el pecho transparente.
Por eso yo me escondo
de esos toros-poetas consagrados
cuando los veo venir con sus lenguas de sílice
y su belfo apretado por la necesidad
de abatir todo lo que sobresalga.
Después, cuando se han ido,
recojo los pedazos de mi sombra
y los aprieto fuerte contra mi corazón.
Y me siento otra vez en el otero,
y contemplo la soledad,
que es anchurosa y fresca, y me deja existir.
Publico este poema (y otros que seguirán) con una súplica: que nadie de este foro se sienta aludido. Las vivencias que, lejanamente, inspiraron estos poemas, signados con (EB), son completamente ajenas al foro.