Página 2 de 2

Publicado: Mié, 01 Ene 2014 12:50
por Guillermo Cumar.
Manuel, un magnífico y elegante poema, en el que el amor se pone de puntillas
para señalar que pones tu sentir a merced del buen hacer poético, cuya lectura
resulta muy gratificante, por la sensibilidad y lirismo que te ocupa.

un abrazo

Publicado: Mié, 01 Ene 2014 18:39
por M. Sánchez
Ferreiro, gracias por tu valiosa opinión. Es una alegría que este poema ye haya gustado.
Todos los felicianos posibles para el año que viene.
Un fuerte abrazo.

re: Ese mar que tuviste en los oidos

Publicado: Mié, 01 Ene 2014 19:08
por M. Sánchez
Liz, no me parece bien que utilices esta ventana mía para hablar de otros escritores de poesía.

Es una broma, amiga, muchas gracias.

Me ha conmocionado leer tu comentario. Es como si me hubiesen dado un beso y después un abrazo.
Fuiste la primera persona en Alaire que me manifestó su gran interés por mi obra poética, que mi poesía era importante para ti. Y eso no lo olvido.

Me acuerdo que publiqué un poema, " Límite de una habitación" lo hice con verdadera intencionalidad, sin tener ni idea, como siempre, de si se valoraría o no esa manera de expresar . Y tú captaste esa intencionalidad y me dejaste un comentario, directo, preciso en ese sentido, de los mejores y más satisfactorios que he recibido. Tampoco lo olvido.
Hoy me dejas un comentario imposible de asumir, pero también imposible de mejorar. Y yo te lo agradezco con todo.

Hablamos de la misma poesía, sentimos la misma poesía, y aunque no escribamos de la misma manera, nuestro espíritu es el mismo.

Amiga, te agradezco tu presencia en este foro. Has sido para mí la razón que he necesitado durante bastante tiempo para continuar participando aquí.

Muchas gracias por todo, un abrazo muy muy fuerte.

Publicado: Vie, 03 Ene 2014 18:32
por Pablo Ibáñez
Manuel,

me gusta mucho, amigo. Me gusta ese tono íntimo y coloquial que consigues, como de recogimiento personal, de entrega a una conversación definitiva (¿con uno mismo?) cuando ya no queda nada más. Amor, recuerdo, nostalgia, existencia, paso del tiempo, recorren el poema llevados como en un vals por ese ritmo potente que tan bien manejas.

Me gusta mucho.

Un abrazo.