Editorial Alaire

La tristeza y la rabia se mezclan poderosamente en este excelente poema sobre la situación de tu patria. Mis felicitaciones, Cecilia. Un abrazo.

Un impecable soneto con una importante carga lírica y reivindicativa. Un placer pasar por tus versos.
Un abrazo.
Pepa

[quote="Cecilia Martos"]PATRIA MÍA


Patria es una loba herida.
Es la leona privada de un cachorro.

Carmen Boullosa

A mi Patria le sangra tanta herida
del dolor que provoca una traición,
tanta muerte no pasa inadvertida,
ya no puede con tanta aberración.

A mi Patria le duele la mentira
de aquellos que proclaman la lealtad,
pues el miedo la tiene ya en la mira
vejando su maltrecha dignidad.

Mi país está herido y es de muerte
es su historia una fosa clandestina,
su insana impunidad me deja inerte.

Agoniza mi Patria y es mi tierra
y siento rabia, instintos de asesina,
hay huellas de mi sangre en esta guerra.

Cecilia Martos
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Muy sentido poema, amiga Cecilia, que transmite la desazón de las grandes injusticias, en este caso de tu país, y que, además, como dices en tus comentarios, te implica directamente en la fatalidad de la sangre. Como no podía ser de otra manera, el trabajo es un grito de pasión que quiere abrigar a la inocencia masacrada.

En cuanto a la forma, este soneto daría para hablar mucho, pero no lo haré porque el fondo es lo suficientemente importante como para olvidar el envoltorio. Sin embargo, a tu requerimiento, no tendría inconveniente en apuntarte ciertos detalles que, a mi juicio, podrían ser interesantes para tus futuros trabajos.

Ha sido un placer leerte. Felicidades, compañera, por este hermoso alegato en contra de las grandes injusticias.
Un cordial abrazo.

Disculpen, queridos amigos, que salte el orden de contestaciones para dirigirme al compañero Rafael Calle, al cual agradezco como siempre su interesante comentario y acepto la propuesta que me sugiere en el mismo. Una vez más reitero mi agradecimiento, querido Rafael, y aprovecho para enviarte un cordial abrazo.

Cecilia

Estimada amiga y admirada colega, Cecilia, no es que me guste mucho utilizar este sentidísimo e importante poema que además del durísimo tema que desarrolla, también tiene para ti, en lo personal, un muy luctuoso recuerdo. En fin, quiero pedirte disculpas por mi intromisión en una forma que, obviamente, es lo menos importante de este soneto.

Tiempo habrá para hablar de mis ideas sobre algunos detalles de la versificación, así que, me comprometo a comentarte en profundidad tu próximo soneto, intentando aportar detalles que puedan serte de ayuda para futuras obras.
Un cordial abrazo