Editorial Alaire

Ramón Carballal escribió:Un poema descarnado, instintivo, sensualmente arrollador. Me ha gustado la lectura. Un abrazo.

Gracias Ramón, me alegra mucho recibir tu comentario.

Un abrazo.

Nésthor Olalla escribió:Cruda, "negra" y arrebatadora entrega, compañero.

Me gustó lo tuyo, me recordó a los textos de J.L. Alvite (historias del Savoy)

Cuando leí tu comentario fui al oráculo (google) a buscar a J.L. Alvite, y estoy inmenso en sus escritos y locuciones, así que doblemente agradecido compañero, por el comentario y por el Savoy.

[quote="Israel Liñán"]

La sordidez también destila el licor poético, de eso no hay duda. Me vienen a la cabeza Bukowski, B. Vian, etc. Un abrazo, amigo.

ROBERTO LÓPEZ escribió:

Israel Liñán escribió:
La sordidez también destila el licor poético, de eso no hay duda. Me vienen a la cabeza Bukowski, B. Vian, etc. Un abrazo, amigo.

Gracias por tu comentario Roberto, un fuerte abrazo.

Israel, me ha encantado el poema, amigo, lo veo como la disección de de un paisaje interior, lo veo como aquellas pinturas donde los colores evitan el tiempo en la intensidad creciente de los hechos. Abrazos y felicitaciones, amigo.

Mala medicina, excelente poema. Me ha llevado a la escena de una película de cine negro. Me ha encantado leerte.

Un abrazo.

Marius Gabureanu escribió:Israel, me ha encantado el poema, amigo, lo veo como la disección de de un paisaje interior, lo veo como aquellas pinturas donde los colores evitan el tiempo en la intensidad creciente de los hechos. Abrazos y felicitaciones, amigo.

Gracias Marius, un fuerte abrazo.

CELIA PUERTA escribió:Mala medicina, excelente poema. Me ha llevado a la escena de una película de cine negro. Me ha encantado leerte.

Un abrazo.

Gracias Celia por leer y comentar el poema.

Un abrazo.

Una maravilla que sube al torreón de las buenas obras.

Un abrazo.

Hermoso e interesante trabajo de Israel.

Israel,

me ha gustado el poema, amigo. Había una canción de Bon Jovi, Bad Medicine, que fue un éxito rotundo en su día. No sé si te has inspirado en ella. Me gusta la crudeza de las descripciones, frías, sin concesiones, sin separación del objeto, sin análisis intelectuales que suavicen la realidad. Muy al estilo del realismo sucio. La aliteración del título al final de cada estrofa le dan una contundencia especial, como de destino irrevocable. Una mala medicina que se debe tragar sí o sí, porque cualquier consideración lleva a ella irremisiblemente. El sexo, mala medicina; la droga, mala medicina; la muerte, mala medicina. El conjunto resulta muy creíble porque, siendo crudo como lo es, no cae en la exageración ni en la provocación adolescente. Las palabras, digamos "malsonantes" (no sé como decirlo sin quedar de cursi), los tacos, vaya, están muy controlados, lejos de la hemorragia, muy encajados. Eso me encanta, odio las hemorragias de tacos.

A mí me gusta mucho.

Un abrazo.

Israel Liñán escribió:Observo en el espejo mi rostro amoratado,
magullado, ceja partida, tabique desviado
pómulo abierto, en fin...
...mala medicina.

La camiseta manchada de sangre y cerveza
apesta a tabaco y a sexo,
alguna costilla rota,
las llaves del coche están en el suelo,
busco hielo en la cocina,
ella suspira desde la habitación,
hermosa diosa borracha
desnuda y sudorosa...
...mala medicina.

Bajo la ducha las jodidas heridas escuecen
se retuercen y supuran deshaciendo los coágulos,
afluentes rojizos que mueren en el sumidero,
vuelvo a ponerme la misma ropa sucia,
miro por la ventana, bloques de ladrillos
y silencio absoluto...
...mala medicina.

Ella se despierta, su mirada azul asoma
desde los hinchados balcones de la resaca,
sonríe, sentada en la cama abre sus piernas,
dedos juguetones que invitan a la despedida,
me acerco vacilante, juega con su boca,
el tiempo desaparece mientras acaricio
el rubio vello de su pubis, su boca es placer,
su boca es orgasmo, su boca...
...mala medicina.

Follamos, volvemos a la horizontalidad,
enciende un cigarrillo, vuelve a sonreír,
-¿no recuerdas mi nombre cierto?
-Cariño ni siquiera sé si te conozco.
Ambos reímos, mientras saca una bolsa bajo la cama,
cien de los grandes, y un kilo de oxitocina.

-Estamos muertos cariño...
...mala medicina.

Derriban la puerta, y miles de balas
destrozan nuestros cuerpos desnudos...

...mala medicina,
mala medicina,
mala medicina.

Realmente estos temas crudos de la realidad los tratan a perfeccion las bandas del rock (todo cuanto sea droga, balas, sexo, y el mismo diablo). Tu poema igualmente nos presenta la metralla de versos que aniquila todo lo que bien pudiera ser una escena de amor. Te felicito, Israel. ERA