Editorial Alaire

F. Enrique escribió:Luchando contra esta apatía que me corroe
y se extiende sin fin en mi falta de horizonte,
que me quema en su frialdad desenfrenada
y me lleva a un estanque de soledad herida.

Me abandonó el amor que siempre me guiaba,
hasta tú que me amaste,
en silencio me gritas que estoy loco;
un expediente abierto
que no podrá cerrarse me acompaña
y unas alas quebradas para saltar al vacío.

En unos días apenas me he quedado sin fe,
me he quedado sin música, sin luz, sin poesía,
insisto hasta el final porque no tengo freno;
he aprendido a hablar sin saber lo que digo.

(Poema de la duda- Marzo-Abril 2011)

tenemos derecho a la crisis, a la catarsis poética. A la duda y a la fe que nos guarda de nosotros mismos. me gusta mucho éste bello poema. Un abrazo poeta. ERA

Bien, Antonio, siempre es agradable que dejes constancia de tu paso por mis poemas, y también lo es que tengas la sinceridad que me muestras, siempre ayuda a mirar un poco lo que podemos llegar a transmitir, y valorar en su debido punto aquellas otras veces, en tu caso las más, en las que no has reprimido tus ganas de halagarme. No sé si te lo he dicho antes, pero es una de esas relaciones, esta que llevo contigo, que, por suerte, mantengo desde los primeros momentos en que empecé a utilizar los foros como medio de comunicación, y no sabes cuánto me alegro de ello, y de no haber cometido ninguna torpeza para empañarla. Siempre es bonito mantener vínculos.

Un abrazo.

Me ha gustado mucho este ejercicio de sinceridad. Un placer.
Saludos

Hay desesperanza en este poema tan bien escrito. Me ha gustado la lectura. Un abrazo.

Llega con fuerza, hondura y sugerente estética literaria el mensaje de tu poema Enrique. Me gustó

saludos

rafael

Con mis reconocimientos, F.Enrique. Poco que agregar a cuanto te han dicho y tan bien te han dicho.
Salud.

Liz, tus palabras hacen que uno se sienta especialmente agradecido. Sé que es un poema triste y desesperanzado que refleja como estaba mi espíritu en el momento de escribirlo.

Un abrazo.

Gracias, Ricardo, lo que me dices es muy alentador. Encuanto a la frase tuya te diré que es muy ingeniosa, a Anne Sexton le dijeron lo mismo para intentar vencer sus continuas depresiones de "pobre niña rica", escirbir y nada mejor que la poesía.

Un abrazo.

Gracias, Begoña, creo que siempre intentamos ser sincero, pero es en este tipo de poemas donde resulta más fácil percibirlo, por ello lo situaría en una tendencia confesional.

Un abrazo.

Acabo de llegar de una reunión poética, Pilar, es maravilloso que siga habiendo reuniones en las que se lee poesía o en las que se recuerda que la guerra no es ninguna solución. Había motivos para hablar de otros poemas y una dulce sonrisa se apartó de mi cara porque, probablemente, este fuera el último poema del que hable... quizás lo escribí dejando que fuera más rápida la pluma que los pensamientos. Yo te agradezco como siempre que estés ahí, incluso cuando no decimos cosas hermosas.

Un abrazo.

Gracias, Ana, lo tenía postergado dentro del proyecto más serio de poemario que he escrito, como tal, quizás, el único. Volver a descubrirlo, no recuerdo si fue para publicarlo aquí. me pareció interesante, a veces uno se siente así aunque no sea edificante y además encaja muy bien en la línea más radical del poemario anteriormente citado.

Un abrazo.

Poder comunicarme contigo, Antonio, es siempre tan grato y tan liberador. A través de esa lucha humilde y callada y de las que nos podrías mostrar tantas heridas y prefieres hablar con la serenidad de Fray Luis.

El poema me acorraló y a partir de ahí toda la lucha se centró en la estrofa central. Ser sincero es decir lo que se siente en un momento, con o sin motivos, deseando lo que se teme.

Yo sé que me podrías hablar de tanto verso arrinconado de tantos poemas inmensos que somos incapaces de ver. Ahí está la lucha.

Un abrazo.

Probablemente, Pepa, sea algo que va en nosotros mismos, hay días que se nos lleva la tristeza, que las cosas no parecen que mejoren. Creo que debemos intentar encontrar nuestra poesía incluso ahí donde pensamos que no se puede hallar. Como siempre amable y dialogante, y, a pesar de la dificultad del tema, nos haces unas sugerencias a tener muy en cuenta..

Un abrazo.

Nadie quiere pasar un momento así, en el que se tambalea todo aquello que le ha sostenido. No es fácil concebir un poema en tales circunstancias. Te agradezco tu comprensión, creo que es interesante indagar en nosotros mismos incluso en los peores momentos.

Un abrazo, Era, siempre eres amable conmigo.

Me gusta, Celia, que se valore esta sinceridad, no es fácil reconocer esta enumeración de frustraciones, la poesía está para los buenos y los malos momentos, siendo aquellos poco dados a la justificación por escrito, nos sumergimos sin pausa y casi sin reflexionar en estos últimos.

Gracias, Celia, un abrazo.