Editorial Alaire

Me doy más que satisfecho, Ana, con la profundidad con la que tu has visto el poema, me gustaría estar en un momento de lucidez para explicar lo que pretendía, quizás un homenaje lleno de ternura hacia esas personas a menudo olvidadas a pesar de ser imprescindibles, quizás indagar en lo poético que puede resultar de la atmósfera de la cotidianidad. Te agradezco toda esa atención que has dedicado al poema y la muy buena interpretación que has sacado de él.

Un abrazo.

No puedo más que decir que es una obra enormemente bella y conmovedora ...muy, muy bella de verdad.

Mis aplausos y sincera felicitación F. Enrique. Un abrazo.

La indiferencia de los demás a nuestro propio hacer, dan resultados negativos. ¿La amabas? Hay vislumbre de amor puro en la conjunción de tus metáforas y en la emotividad que brilla en todo el poema. Un excelente trabajo, aunque alguien algo dijo, no se trata de una inspiración común, solo de la propia. Mi abrazo y mis felicitaciones van a la par.

José Manuel F. Febles

A través de lo que me dices, Pepa, me llega la atención que le has prestado a este poema del que me gustaría que transmitiera la humildad del personaje. Dices bien cuando resaltas que podría ser un oficinista o un profesor pero difícilmente ellos pueden llegar a estar tan implicados con su tarea hasta el punto de olvidarse de ellos mismos. Me pareció oportuno rendir homenaje a algo que no es una profesión sino una forma de vivir que se dio durante mucho tiempo, por suerte, ha ido cambiando nuestra sociedad y se lucha por aspiraciones individuales, pero todavía quedan mujeres que deciden voluntariamente interpretar el papel que consideran más importante de sus vidas, al haber demasiados sentimientos implicados se pierde la medida de la entrega y dedicación a los otros en detrimento de uno mismo. He querido representar a través de lo que conozco a la ama de casa que seguro, en mayor o menor medida, todos hemos conocido, con todo el cariño que puedo y sabiendo lo mucho que he aprendido a través de sus equivocaciones llenas de ternura

Gracias, Pepa, un abrazo.

Hola, Enrique

Me parece muy profundo tu poema, muy empático para meterte en la piel de la mujer que tan bien tienes en estima, es muy conmovedor. Te envío un saludo caluroso que acompañe tu gran perdida.

"Una muchacha deliciosa de cincuenta años" queda aquí reflejado todo el pozo de melancolía, lo que pudo ser y no fue; aunque un alma adolescente, de un artista adolescente enamorada, sigue en pie floreciente , para el alma sensible que lo pueda ver.

Gracias por compartir tus poemas

Un abrazo

F. Enrique:

Vuelvo a acercarme a este poema que me parece
sensacional.

Aplausos
Un beso
Ana

Conmovedores versos. Plenos en belleza y buen hacer y decir. Hermoso broche final. Un abrazo y feliz día,

Judit

Cada día, Marius, me siento más inseguro al analizar el comportamiento de las otras personas, pero no tengo dudas a la hora de alabar a algunas personas a pesar de sus equivocaciones, es imposible seguir al corazón sin errar pero uno se queda con la sensación de que lo mejor de esta especie a la que pertenecemos nos lo ofrecen personas anónimas, sencillas.

Gracias, Marius, un abrazo.

Un poema de alto nivel, donde la expresión poética recorre los renglones dejando inspiración y sentimiento a manos llenas. Ha sido un placer de lectura. Te felicito.
Un fuerte abrazo.

Gracias, Carlos, puse todo mi empeño en sacar adelante este sentido homenaje por estas personas anónimas que se nos hacen imprescindibles, me agrada especialmente que te haya llegado el mensaje.

Un abrazo.

Hay ciertas relaciones, Bruno, que siempre han sido más fuertes que mi capacidad para comprenderlas, la música y la poesía siempre han estado ahí, y casi nunca me he planteado lo idóneo o no que pueda ser la asociación de una canción con un poema. No soy seguidor de King Crimson pero Epitaph, también Moonchild, me pareció excelsa y te agradezco enormemente que la hayas nombrado para relacionarla con mi poema.

Un abrazo.

Un poema magnífico amigo, lleno de imágenes y música, con un final apoteósico. Me ha gustado mucho, siempre es un placer leerte. Un abrazo muy fuerte.

Me han llegado muy hondo tus palabras, Luis, quizás haya sido la manera que has tenido de expresarte, quizás las propias palabras. Como ya he dicho otras veces, me alegro mucho de lo que me has dicho aun en el caso de que no lo merezca.

Un abrazo.

Quizás al explicar un poco una relación extraña pueda parecer que no tiene mucho que ver con el poema, a través de llamadas telefónicas me hablaba de su hijo, le preocupaba mucho su situación un tanto errática y, aunque nunca pude proporcionarle demasiada información de dónde estaba o qué hacía, su espíritu combativo le llevaba al desahogo ya que encontraba en mí la comprensión que le faltaba por parte de otras personas que lo conocían y estaban mejor informadas, pero tenían una forma un tanto peculiar de resguardar su intimidad.

Un abrazo.

Gracias, Raúl, creo que el texto que sirve de introducción explica un poco lo que pretendía con el poema, podría hablar de las muchachas de cincuenta años, de la entrega, del material valioso y entrañable que dejan los recuerdos, de la poesía que no está escrita y que encontramos en tantos momentos y en otras expresiones.

Un abrazo.