Editorial Alaire

S.Castelar escribió:Tu poema Alonso, de corte existencial, indaga en la eterna pregunta del ser humano.
Me encanta la imagen del dragón en este contexto, el fuego que todo lo devora cuando nos sentimos arrasados de la propia existencia, ese dragón que incluso es vulnerable, que en su temeridad se autocalcina...a veces pareciera que todos somos muertos en espera de otro paso, en tránsito finito hacia la nada o hacia el todo.

Un placer leerte, compi

Abrazos

Sara

Ana Villalobos Carballo escribió:Entre el miedo y la vida hay un dragón hambriento
que cerrando los ojos, muestra agudos sus dientes,
eligiendo ceder, postrado
sin afectos, sin húmedas mejillas,
muriendo ausente, como estatua cínica
que vuelca impura sus oraciones al vacío:



Llévame a las tinieblas de la vida
donde la sombra es luz
y consigo vivir habiendo muerto

Un poema existencial que engancha desde los primeros versos y no queda más remedio que deslizarse por ellos suavemente(no sea que se despierte el dragón). Versos emotivos y certeros, tan ciertos como que no se valora, ni se aprecia lo que es estar vivo hasta que no se ha pasado por la muerte, y es que hay muchas formas de estar muertos en vida. Siempre un gusto leerte.

Un beso que te llegue al corazón

Ana V

Mía escribió:Triste y errabundo como un splenn de Baudalaire su poema
y de nuevo en el miedo como un cielo que pesa.

ha sido un gusto leerle, un saludo

Alejandra Goerne escribió:Fuerte poema de quienes aún viviendo estamos muertos. Esa búsqueda de "ser" después del umbral al que hemos llamado muerte. Dónde habrá más vida? aquí o allá? dónde habita más la muerte? aquí o allá? Eso no lo descubriremos, no aún, no ahora...será mañana. Me ha encantado esta tu profunda reflexión atiborrada de belleza. Un abrazo amigo.

Ramón Carballal escribió:Me parecen unos versos de gran calidad, profundos, que ahondan en el sentido de la existencia. Esa estrofa final abre una puerta a la esperanza. Excelente poema. Un abrazo.

Lourdes Spin escribió:*


Bellos versos, estimado Alonso, con un ritmo y una profundidad abismal. Y mira la estrofa de los abrazos en donde queda y muere toda la existencia. Hermoso pensamiento este que nos dejas ver.

Un beso


Spin