Editorial Alaire

Liz Barrio escribió:

E. R. Aristy escribió:





TIEMPO PROFUNDO

A Liz Barrio


Kathak nos cuenta del tiempo profundo
al ir girando con su saya dorada.
Nos cuenta la historia del planeta rojo
dibujado sobre sus pies y sus palmas,
sellando su ceño morado.

Kathak nos cuenta gesticulando, traslado de signos
en calcinantes calderas de donde densas columnas de humo
levantan templo al gran diluvio con presagioso fuero.

Kathak nos cuenta en tiempo profundo,
sobre el soñador de sueño circular y aturquesado,
sus pies menudos acompasan el corazón del loto,
y holgado flota sobre las aguas.

La vega real, cuenta Kathak,
se forma con un granizar de estrellas,
el viento juega con la méduna,chispa a chispa la enternidad se enciende,
dentro de cada lágrima hay un tibio mar.


E. R. Aristy

La danza, ¡ah, la danza! Para mí siempre es y será razón, luz, goce. Pero cuando la danza se amiga con la poesía, con los versos que tienen la delicadeza precisa, la elocuencia en concierto, la armonía cubierta de belleza, entonces es un prodigio, la más hermosa expresión del espíritu.
No me esperaba este obsequio inmerecido. Leo y releo y mi corazón agradecido y conmovido se regocija y expande.
Gracias querida poeta, gracias infinitas.
Recibe un beso y un abrazo desde mi alma

Josefa A. Sánchez escribió:Siempre me ha parecido que la poesía de Liz es como una música para bailar y tu poema la cumplimenta con maravillosos versos. Mi enhorabuena a ambas.
Un abrazo y Feliz Navidad.
Pepa

Rafel Calle escribió:Hermosa dedicatoria, amiga Roxana, en la que haces gala de tu estilo caracterizado por la profundidad del mensaje y un léxico bello y comprometido.
Feliz Navidad y salud que no nos falte.
Un cordial abrazo.

Gerardo Mont escribió:Danza la poesía por la musicalidad de versos exquisitos que se disfrutan y se hacen sentir profundamente. Inagotable el arte de tu pluma, poeta. Mis abrazos de amigo y mis mejores deseos para el año venidero.

E. R. Aristy escribió:




TIEMPO PROFUNDO

A Liz Barrio


Kathak nos cuenta del tiempo profundo
al ir girando con su saya dorada.
Nos cuenta la historia del planeta rojo
dibujado sobre sus pies y sus palmas,
sellando su ceño morado.

Kathak nos cuenta gesticulando, traslado de signos
en calcinantes calderas de donde densas columnas de humo
levantan templo al gran diluvio con presagioso fuero.

Kathak nos cuenta en tiempo profundo,
sobre el soñador de sueño circular y aturquesado,
sus pies menudos acompasan el corazón del loto,
y holgado flota sobre las aguas.

La vega real, cuenta Kathak,
se forma con un granizar de estrellas,
el viento juega con la méduna,chispa a chispa la enternidad se enciende,
dentro de cada lágrima hay un tibio mar.


E. R. Aristy