Editorial Alaire

Este poema no tiene desperdicio, hermoso, sugerente y escrito con mucha pulcritud, un gusto leerte, Ignacio.
Salud.

Saludos, Andrés.
Gracias por el comentario que aprecio.
Un abrazo,
Ignacio

Ignacio mincholed,

Paso por tu extraodinaria poesía, querido amigo

Un abrazo fuerte

Ricardo, siempre aprecio tus visitas al hilo de tus palabras. Gracias.

Un fuerte abrazo,
Ignacio

Podría aficionarme a leer tus versos. Estos me han gustado mucho y los he disfrutado.
Un abrazo.
Pepa

Sonrío... gracias por el bonito comentario, Josefa, lo aprecio.

Un abrazo,
Ignacio

Ignacio Mincholed escribió:

Hoy, como la noche, he aprendido a transfigurarme
como el día
que arrastra el ligero engaño de luces y sombras
y es a la vez unas y otras
como la noche
que calla tras los velos ondulantes el silencio
entre bocas amantes o grita locuras del alma
como el desierto
que es agua en otra forma donde nadar se impone
a volar espacios densos de atmósfera en grano
como el lago
dónde pescar un reflejo de aquel rostro que existió
en esa noche que anduve entre adoquines de brillo
como grafito limpio en su negra esencia, tan puro.

Hoy mi figura es imprecisa disuelta en arena y aire
viajando de cuerpo a cuerpo
de casa en casa de astro en astro de pupila en pupila
y soy noche y soy día
poema y tortura
carne y asfalto
melodía y grito, transfigurado.


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Ignacio, qué bueno es volver a leerte, qué bueno ver que el tiempo en lugar de disolverte, potencia tu palabra, un abrazo, Luna.-

Luna de Nos escribió:

Ignacio Mincholed escribió:

Hoy, como la noche, he aprendido a transfigurarme
como el día
que arrastra el ligero engaño de luces y sombras
y es a la vez unas y otras
como la noche
que calla tras los velos ondulantes el silencio
entre bocas amantes o grita locuras del alma
como el desierto
que es agua en otra forma donde nadar se impone
a volar espacios densos de atmósfera en grano
como el lago
dónde pescar un reflejo de aquel rostro que existió
en esa noche que anduve entre adoquines de brillo
como grafito limpio en su negra esencia, tan puro.

Hoy mi figura es imprecisa disuelta en arena y aire
viajando de cuerpo a cuerpo
de casa en casa de astro en astro de pupila en pupila
y soy noche y soy día
poema y tortura
carne y asfalto
melodía y grito, transfigurado.

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Ignacio, qué bueno es volver a leerte, qué bueno ver que el tiempo en lugar de disolverte, potencia tu palabra, un abrazo, Luna.-

Gracias Luna. No he estado por aquí... y llegar con tu nota está muy bien. Sonrío.

Un abrazo.
Ignacio