Lo banal de ciertos ímpetus (revisado)

[José Manuel Sáiz]

Las dos versiones me han gustado, están escritas con mucha sensibilidad. Felicitaciones.

Muchas gracias Javier. Agradezco sobremanera tu comentario.
Un fuert abrazo para ti.
J. manuel

[José Manuel Sáiz]

He disfrutado igualmente ambas versiones, porque en las dos esta la idea del poema. Por desgracia para mi tengo algo de esa ola impetuosa, aunque lo mio no es la ira, sino la ireflexión, afortunadamente con la edad creo que me voy remansando.
Un abrazo.
Pepa

Jejeje, gracias por verter tanto de ti en el comentario. Como siempre, muy generosa conmigo.
Te doy un abrazo muy fuerte, amiga.
J. Manuel

[José Manuel Sáiz]

LO BANAL DE CIERTOS ÍMPETUS

Tiene la ola dudas, llegando a tierra,
dónde fundamentar su breve imperio.

Ariete de la mar y de su furia,
su ímpetu se extiende con la marea...


Hola José Manuel,


Un placer leerte, tanto aquí como en "El Faro", gracias, gracias por todo.


Me gustaría poder un día leer en público este poema, usando los gestos de un director de orquesta en composición de 4/8. Mientras tanto invito a tus lectores a tararear estas cuatro frases con la música de "Cantinero de Cuba". Sólo por entretenimiento.


Tiene la ola dudas, llegando a tierra,
(Tiene mi tierra un son y una cantina)


¡Toda una composición!


Un abrazo,


Víctor F. Mallada


Qué agradable sorpresa encontrarte de nuevo, esta vez en mis poemas.
La verdad es que fue un hallazgo grato para mí tu encuentro y tu presencia en Madrid. En cierta manera el amigo Julio estuvo bien representado contigo y con tu música.
No sólo te doy permiso para leer mi poema cuando quieras, si no que es todo un honor para mi si lo haces.

El poema lo he modificado un poco. Creo que resulta más fluida su lectura.
Muchas gracias por todo, querido amigo.
Un abrazo muy fuerte.
J. manuel

[Gabriela Cobian]

Me ha gustado mucho como describes la furia y la serenidad del mar, creo que todos somos un poco así, como esas olas que vienen y después se van, se pierden en el olvido, aunque quizás algunas se quedan en momentos de reflexión.
Un abrazo
Gabriela

[José Manuel Sáiz]

Hemos optado, querido amigo José Manuel (me refiero a Ferreiro y un servidor), por comentarte la segunda versión que nos parece más afortunada. En medio de la cumbre espirituosa producida por los efluvios del zumo heráldico proveniente de la vid, mientras Ferreiro ronca, yo le recito tu poema. Sin embargo, nada es suficiente para apaciguar los racimos bronquiales de un gallego medio chiflado y del todo colocado. Yo le sugiero al oído: No sé dónde tu velero, piloto de azucar fino, ni en que prado submarino navega más marinero, más salado y pinturero. Pero nada, no hay manera. Así que dispongo los restos de las meninges que me quedan después de un opíparo festín, para decirte que tu poema nos ha gustado bastante más de lo que somos capaces de exponer aquí y ahora.
En fin, que te digo: Las rutas de tu albedrío esperan a tu navío mareadas de esperar, capitán, mira en la mar las señas del amor mío. Si quererte es navegar, vamos al mar desafío del escollo y del bajío. Si naufrago en tu ternura, ay, es tan dulce la amargura, que me entierren el la arena y tú tendrás tanta pena que encallarrás de amargura. Y serás labradorcillo, y yo estaré en tu cuchillo, en tu siega y en tu trilla y yo me pondré ammarillo como una espiga de estío.
Bueno, entre unos extraños ruidos que se parecen a ronquidos de otro mundo, me acerco a Ferreiro y le acabo por decir: Te quejas, amor, te quejas, ay, que dulces sobremesas, me saben a vino y a pan y los días se me van en la paz de tus promesas.
Termino diciéndote que el dueño del hostal, será el primer distribuidor de nuestro libro. Y, por cierto, tu poema es hermoso, ciertamente muy hermoso, querido amigo José Manuel. Me voy a dormir la mona y eso...
Un fuerte abrazo.

.......

Rafa, no debiste recitarle a Ferreiro mi poema en estado de sopor y de embriaguez.
Pudiste provocar una reacción distinta a la deseada.
Intentando acallar sus sonidos guturales, bien pudieras haber despertado sus instintos animales y su libido de gallego conquistador… y más estando los dos a solas en una misma habitación y a un palmo el uno del otro.
Menos mal que al menos escogiste ese y no otro poema. Tengo varios que hablan del amor (de un amor pasional que no distingue género ni condición).
¿No sabes acaso que en estado de ensoñación, la mente y el instinto capta más sutilmente lo que percibe? Sin duda en su subconsciente habrá quedado impreso el timbre de tu voz y la pujanza de tu sensibilidad. No te extrañe la caída de ojitos de Ferreiro al despertar y verte a su lado. Aunque conociéndoos a los dos y vuestra varonil reputación, pienso que el primer comentario de J.J. al verte a su lado fuera un… “¡mariconadas las justas, Rafa!”.

Gracias Rafel por tu simpático comentario a mi endecasílabo (o a lo que se parezca).
La verdad que fue una gozada disfrutar de la tarde y la noche madrileña con todos vosotros.
Un abrazo, amigo.
J. Manuel










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[Ramón Ataz]

Aunque yo también creo que la versión libre te ha quedado más redonda que la de endecasílabos (si bien esta última tampoco es nada desdeñable), me ha encantado, en cuanto tiene de experimento, la idea de hacer el mismo poema de una y otra forma.
En fin, un gran poema, como grande es la idea que lo inspira, y por cierto, estupendo también el comentario de Rafel, con el que me he podido reír y envidiaros todavía más por no haber podido estar en Madrid.


Un abrazo.

[José Manuel Sáiz]

Me ha gustado mucho como describes la furia y la serenidad del mar, creo que todos somos un poco así, como esas olas que vienen y después se van, se pierden en el olvido, aunque quizás algunas se quedan en momentos de reflexión.
Un abrazo
Gabriela

Muchas gracias Gabriela por tu generosidad al comentar.
te mando un fuerte abrazo.
J. manuel

[José Manuel Sáiz]

Aunque yo también creo que la versión libre te ha quedado más redonda que la de endecasílabos (si bien esta última tampoco es nada desdeñable), me ha encantado, en cuanto tiene de experimento, la idea de hacer el mismo poema de una y otra forma.
En fin, un gran poema, como grande es la idea que lo inspira, y por cierto, estupendo también el comentario de Rafel, con el que me he podido reír y envidiaros todavía más por no haber podido estar en Madrid.


Un abrazo.

Gracias Juan. El comentario de Rafa no tiene desperdicio. Lo que hace la primavera.
Un abrazo.
J. Manuel

[Andrés García Santos]

Este poema me muestra mucha inspiración, un gusto haberlo leído. Felicitaciones, José Manuel.

[Ramón Castro Méndez]

Pues me han gustado las dos versiones, en ambas demuestras una sensibilidad más que palpable y un trazo delicado en las imágenes.
Mi felicitación.

Un fuerte abrazo.