Editorial Alaire

lazaro Habana escribió:Ese diálogo con ti mismo,
uff , engrandece.
Tu poesía es contundente
apoyada en ese florecido de imágenes que la hace muy distinta

abrazos Ramón

lázaro

Angel Valles escribió:

Ramón Carballal escribió:Mi casa como un corazón blanco. Los juegos,
la claridad, los mapas de mil paredes rojas,
el dorado y su silencio, la doctrina inconclusa
de una elipse. Y después los racimos del enebro,
las canciones que han roído mi adiós.¿es así
una familia, como un oráculo o el acertijo
sin branquias del futuro? No lo sé, mi raíz
acomoda sus pasos en flujo de estaciones,
de néctar y de azul. Me dejo guiar
entre un sol y su noche. Soy un hombre
que ha nacido ayer, soy la pregunta
inversa que aún resiste. ¿en qué paráfrasis
mi memoria desgajada?¿dónde tu abril
oscuro?. Se adormece el trino de los espejos
¿para quién su canto de azar?

Evocar es vivir con precisión única.
Muy hermosa tu obra Ramón.
un abrazo
angel

Ramón Carballal escribió:Mi casa como un corazón blanco. Los juegos,
la claridad, los mapas de mil paredes rojas,
el dorado y su silencio, la doctrina inconclusa
de una elipse. Y después los racimos del enebro,
las canciones que han roído mi adiós.¿es así
una familia, como un oráculo o el acertijo
sin branquias del futuro? No lo sé, mi raíz
acomoda sus pasos en flujo de estaciones,
de néctar y de azul. Me dejo guiar
entre un sol y su noche. Soy un hombre
que ha nacido ayer, soy la pregunta
inversa que aún resiste. ¿en qué paráfrasis
mi memoria desgajada?¿dónde tu abril
oscuro?. Se adormece el trino de los espejos
¿para quién su canto de azar?

Josefa A. Sánchez escribió:Una excepcional forma de evocar el pasado con una gran riqueza de metáforas. Me identifico con ese "hombre nacido ayer" y con esa "pregunta inversa que aún resiste".
Un disfrute leerte.
Un abrazo.
Pepa

E. R. Aristy escribió:

Ramón Carballal escribió:Mi casa como un corazón blanco. Los juegos,
la claridad, los mapas de mil paredes rojas,
el dorado y su silencio, la doctrina inconclusa
de una elipse. Y después los racimos del enebro,
las canciones que han roído mi adiós.¿es así
una familia, como un oráculo o el acertijo
sin branquias del futuro? No lo sé, mi raíz
acomoda sus pasos en flujo de estaciones,
de néctar y de azul. Me dejo guiar
entre un sol y su noche. Soy un hombre
que ha nacido ayer, soy la pregunta
inversa que aún resiste. ¿en qué paráfrasis
mi memoria desgajada?¿dónde tu abril
oscuro?. Se adormece el trino de los espejos
¿para quién su canto de azar?

Tu poema es sublime, Ramon: "Mi casa como un corazon blanco", la nostalgia acaricia la cabeza de ese nino, es una estampa titulada "Inocencia", vista por un hombre que aun posee la capacidad de recuperacion del nino.

Un fuerte abrazo,
ERA