Ritmo, musicalidad...
-
- Mensajes: 4458
- Registrado: Sab, 10 Dic 2011 16:21
- Ubicación: Madrid
Re: Participa aquí mismo, en la musicalidad en el poema
- Pablo Ibáñez
- Mensajes: 5020
- Registrado: Lun, 29 Jun 2009 10:59
- Ubicación: Ovetense en La Granja de San Ildefonso
- Contactar:
Re: Participa aquí mismo, en la musicalidad en el poema
excelente el mensaje, amigo. Más que un mensaje es un artículo experto y completo sobre el tema. Me ha resultado muy enriquecedor, volveré para estudiarlo más detenidamente.
Gracias.
-
- Mensajes: 13275
- Registrado: Sab, 29 Dic 2007 14:18
- Ubicación: España - Bilbao
Re: Participa aquí mismo, en la musicalidad en el poema
Abrazos
Ana
-
- Mensajes: 3342
- Registrado: Lun, 11 May 2009 18:31
Re: Participa aquí mismo, en la musicalidad en el poema
Ana, he visto por tu participación que hemos tocado temas parejos, cosa que me agrada. Pablo, has mencionado algo que me parece muy interesante y no querría que pasara desapercibido:
“Dicen que la musicalidad, la rima, el ritmo de los poemas de la antigüedad era una manera para que fuesen mejor recordados y más fácilmente trasmitidos”.
Cierto, subyace una intencionalidad para que quede grabado el mensaje. Es el caso del pregón, la cantinela que lo acompañaba (¿musicalidad?) contribuía a ese recuerdo y transmisión que señala Pablo, a la eficacia para asegurarse de que llegara a todos a quienes afectaba el asunto. En la misma línea estarían los Romances de ciego, recitados que originariamente no tenían un formato físico y trataban asuntos truculentos, llamando la atención del personal apoyados en rimas y estructuras de los romances tradicionales. Es muy probable que este aspecto, entre otros, haya sido un factor que ha contribuido a mantener la idea de que la poesía es fundamentalmente rima y musicalidad, desvirtuando gravemente el sentido popular que se tiene de la poesía.
Somos capaces de percibir una melodía con cierta facilidad, pero percibir la armonía de una obra no resulta tan fácil para un oyente poco experimentado, o sin un mayor interés por entender la obra musical en toda su dimensión. Coloquialmente podemos decir que “nos quedamos con su musicalidad”, con el aspecto notorio del sonido. Del mismo modo, si escuchamos una base rítmica en primer término, detectamos con facilidad su ritmo aunque no conozcamos nada sobre música, podemos repetirlo dando palmadas sobre el muslo o marcándolo con los pies.
El ritmo y la melodía avanzan temporalmente de forma horizontal, mientras que la armonía avanza de forma vertical al constituir un todo, un eje, un sonido simultaneo conjugando diferentes sonidos.
La melodía es aquello que se nos queda de forma superficial, la recordamos y podemos tararearla. La armonía es aquello que nos cala, que traspasa el sentido auditivo para conformar un sonido mental, un ideario musical de la obra completa. Sobre la armonía, fuera del campo de la música, todos tenemos una idea de qué representa y por tanto no es necesario reseñar.
¿Qué deseamos que conforme un poema en la mente del lector? Aquí las opiniones andan sueltas. Aunque, no sé si son tanto opiniones como gustos.
En ocasiones, un verso identifica todo un poema difuminando a la vez al resto de versos aunque contengan una notable significación. Neruda hizo desde dos versos finales uno de los más relevantes poemas para el recuerdo:
Quiero hacer contigo / lo que la primavera hace con los cerezos.
No pretendo excluir nada del poema, al contrario, deseo señalar la idea de armonía del poema completo, partiendo de estos dos versos por ser más fácil identificar el sentido de lo que deseo expresar y, a la vez, señalar el ritmo de pensamiento que venimos tratando.
El ritmo lingüístico está presente, el ritmo del verso aun siendo un poema sin metro ni rima está latente y, sin duda, el ritmo de pensamiento está en primer término hasta llegar a la síntesis, el deseo final del poeta: transmitir su imposible. A lo largo del poema presenta un recorrido armónico basado en la comparación, reiteración, personificación, antítesis y similitud; esto es, un ritmo de pensamiento que envuelve al poema sin necesidad de recurrir a la rima ni al metro.
Por no extenderme, no voy a identificar cada recurso con su correspondiente significación ya que, además, es un análisis ya hecho y de fácil seguimiento apenas se tienen los versos delante.
El ritmo de pensamiento es la sustancialización del poema. Aquí la armonía salta por encima de cualquier musicalidad.
¿Qué más necesita un poema? Los diferentes sonidos se hacen uno mediante una armonía ejemplar.
-
- Mensajes: 4458
- Registrado: Sab, 10 Dic 2011 16:21
- Ubicación: Madrid
Re: Participa aquí mismo, en la musicalidad en el poema
Yo no querría entrar en polémica, pero si no expongo lo que pienso doy a entender una conformidad con parte de lo expuesto hasta ahora, que no tengo.
Cuando se dice aquí:” La melodía es aquello que se nos queda de forma superficial, la recordamos y podemos tararearla. La armonía es aquello que nos cala, que traspasa el sentido auditivo para conformar un sonido mental, un ideario musical de la obra completa. Sobre la armonía, fuera del campo de la música, todos tenemos una idea de qué representa y por tanto no es necesario reseñar”.
Creo que es todo lo contrario. La música, la musicalidad, es lo que recorre todo el poema, y lo que resulta imposible de recordar y menos de tatarear. Es algo que se siente en el oído sin darse a penas cuenta, es algo que llevan las palabras y su colocación en un texto. Si en un poema existe una melodía pegadiza, eso es intrascendente a efectos de valor poético. Esto no significa que no sea agradable al oído.
El pensamiento es lo que crea por su agudeza, por su originalidad, por su ingenio, la belleza de significado lingüístico. No estoy pensando únicamente en el pensamiento lógico, sino también en el órfico. Es la propia belleza de ese pensamiento, pero sobre todo su manera de expresarlo, lo que enriquece el poema. Si ese pensamiento no va acompañado de un contenido musical, entonces daría igual colocarlo en un texto en prosa. Es más, es donde creo que debería estar. Y no perdería su belleza.
A mi entender el “ritmo de pensamiento” influye muy poco en la musicalidad de un poema.
En cualquier caso creo que podemos tener diferentes visiones porque focalizamos nuestra sensibilidad sobre aspectos diferentes del poema; sobre los que fundamentamos nuestra creatividad. Por este motivo la poesía de un autor y de otro, son diferentes.
Creo que lo que hace grande a un poema, no es la musicalidad ni, a mi entender, mucho menos su ritmo de pensamiento, sino la fuerza con la que llegan sus palabras y sus ideas al cerebro y al corazón del lector. La musicalidad, o el ritmo de pensamiento, me parece que son aspectos consustanciales con la propia poesía, pero nada más.
Los recursos poéticos ayudan a crear musicalidad, pero puede haber poemas, y de hecho los hay, que tengan pocos recursos poéticos y que sean muy musicales. Creo que los recursos poéticos contribuyen mucho más a generar pensamiento que musicalidad.
- Rafel Calle
- Mensajes: 25032
- Registrado: Dom, 18 Nov 2007 18:27
- Ubicación: Palma de Mallorca
Re: Participa aquí mismo, en la musicalidad en el poema
Abrazos.
- Marisa Peral
- Mensajes: 11687
- Registrado: Mié, 30 Jun 2010 19:06
- Contactar:
Re: En el chat de Alaire, la musicalidad en el poema
Yo, personalmente y muchas veces, necesito "escuchar" el poema para ponerle el ritmo y el mismo poema, me transmite ritmo y música diferente si es declamado por una u otra persona.
Otra cosa sobre el aprendizaje; yo tengo cuatro nietos entre los diez y los cuatro años, y muchas materias las aprenden cantando y ¿qué mejor ejemplo de ritmo y musicalidad?
Os sigo.
Feliz Pascua de Resurrección.
Marisa Peral Sánchez
¡Nunca te dejes poner
el tornillo que te falta.
Corre y se feliz!
—-
- Concha Vidal
- Mensajes: 5915
- Registrado: Vie, 30 Nov 2007 14:34
Re: Participa aquí mismo, en la musicalidad en el poema
Abrazos mediterráneos a todos.
-
- Mensajes: 13275
- Registrado: Sab, 29 Dic 2007 14:18
- Ubicación: España - Bilbao
Re: Participa aquí mismo, en la musicalidad en el poema
Sí creo que un poema puede ser discursivo, lineal, que cuenta emociones, sentimientos o pensamientos o ser "no lineal".
Cuando es "no lineal" puede tener una estructura aparentemente caótica o ser un poema fractal o jugar con los tiempos verbales creando una especie de flashbacks o moverse en varios planos de realidad: realidad y sueño, lo vivido y lo imaginado, la vida privada y la vida social, etc.
Para mí la musicalidad está en las palabras, las acentuaciones, las pausas, los recursos del sonido: aliteraciones, cacofonías, uso de los tiempos verbales, empleo de palabras con unos fonemas u otros.
Creo que en poesía no hay sinónimos absolutos. Una palabra tiene una impronta sonora y unas connotaciones diferentes a otra (aunque en el diccionario ponga que son sinónimas).
Lo que sí creo es que los poemas pueden arrojar una cosmovisión del mundo original o no. A veces están adaptados a estereotipos.
Cuando un poema (y si escribe muchos así un poeta) nos permite penetrar en aspectos de la realidad que antes no percibíamos
sentimos algo especial. Es como si se abrieran las puertas de la percepción.
En cambio cuando un poema nos conecta con temas recurrentes (amor, soledad, muerte, desamor, fugacidad de la vida) y lo hace de un modo convencional lo que sentimos es otra cosa. La unión con los campos de pensamiento y sentimiento ya establecidos en estos temas. Entonces el poema funciona casi como un analgésico del alma.
Un poema tiene que expresar belleza y verdad, pero estos conceptos no son absolutos y también se puede buscar la expresión de los opuestos: no belleza y no verdad.
Finalmente un poema "musical" pero que no exprese nada podría parecer innecesario. Sin embargo para el poeta que lo ha escrito puede ser muy necesario. Puede ser su particular manera de acercarse a la belleza. Y para algunos lectores también puede estimular algo en su interior.
Por supuesto el poema "perfecto" (si es que existe) tiene que tener una forma y un fondo amalgamados que lleguen no sólo al oído sino a la mente, a la conciencia, al mundo interior.
Abrazos a tod@s
Ana
- Pablo Ibáñez
- Mensajes: 5020
- Registrado: Lun, 29 Jun 2009 10:59
- Ubicación: Ovetense en La Granja de San Ildefonso
- Contactar:
Re: Participa aquí mismo, en la musicalidad en el poema
yo no lo pillo, macho. Lo del ritmo del pensamiento. Debo ser muy burro, ya lo siento... He leído varias veces el Poema 14 de Neruda, un gran poema, sin duda. A mí no me ha llamado la atención especialmente su musicalidad, su ritmo, la verdad, aunque lo tiene. Me llama muchísimo más la atención la potencia de sus imágenes, de sus metáforas, de extraordinaria calidad, inalcanzables para cualquier mortal.
Juegas todos los días con la luz del universo.
Sutil visitadora, llegas en la flor y en el agua.
Eres más que esta blanca cabecita que aprieto
como un racimo entre mis manos cada día.
A nadie te pareces desde que yo te amo.
Déjame tenderte entre guirnaldas amarillas.
Quién escribe tu nombre con letras de humo entre las estrellas del sur?
Ah déjame recordarte cómo eras entonces, cuando aún no existías.
De pronto el viento aúlla y golpea mi ventana cerrada.
El cielo es una red cuajada de peces sombríos.
Aquí vienen a dar todos los vientos, todos.
Se desviste la lluvia.
Pasan huyendo los pájaros.
El viento. El viento.
Yo sólo puedo luchar contra la fuerza de los hombres.
El temporal arremolina hojas oscuras
y suelta todas las barcas que anoche amarraron al cielo.
Tú estás aquí. Ah tú no huyes.
Tú me responderás hasta el último grito.
Ovíllate a mi lado como si tuvieras miedo.
Sin embargo alguna vez corrió una sombra extraña por tus ojos.
Ahora, ahora también, pequeña, me traes madreselvas,
y tienes hasta los senos perfumados.
Mientras el viento triste galopa matando mariposas
yo te amo, y mi alegría muerde tu boca de ciruela.
Cuánto te habrá dolido acostumbrarte a mí,
a mi alma sola y salvaje, a mi nombre que todos ahuyentan.
Hemos visto arder tantas veces el lucero besándonos los ojos
y sobre nuestras cabezas destorcerse los crepúsculos en abanicos girantes.
Mis palabras llovieron sobre ti acariciándote.
Amé desde hace tiempo tu cuerpo de nácar soleado.
Hasta te creo dueña del universo.
Te traeré de las montañas flores alegres, copihues,
avellanas oscuras, y cestas silvestres de besos.
Quiero hacer contigo
lo que la primavera hace con los cerezos.
Seguramente irá en apreciaciones, como dice Manuel. Creo entender como "ritmo de pensamiento", si no te he entendido mal, por ejemplo la repetición de la referencia al viento, constante en el poema. Esa recurrencia semántica y sintáctica, "el viento", genera desde luego una bella sensación con múltiples aristas: violencia, naturaleza, pasión, lucha contra un destino ciego, tristeza, etc. No sé si se puede llamar ritmo, yo lo llamaría "desarrollo de una analogía". El viento parece una metáfora desarrollada sucesivamente (una analogía) de la dificultad o imposibilidad de concretar el amor.
Para mí el ritmo es otra cosa, y no siempre se obtiene con metro y rima, aunque también. Cojo al azar un poema de Gamoneda, poeta nada rancio ni anticuado, un innovador puro. Del poemario Lápidas, empieza así:
Tras asistir a la ejecución de las alondras has descendido aún
hasta encontrar tu rostro dividido entre el agua y la profundidad.
Te has inclinado sobre tu propia belleza y con tus dedos ágiles
acaricias la piel de la mentira:
Para mí es como almíbar en los labios recitarlo, no sé como decirlo. La belleza del pensamiento y la belleza de la musicalidad, unidas como por arte magia
acaricias la piel de la mentira
Bueno, es un endecasílabo canónico, que puta mala suerte, pero no me digas que no es como miel, musicalmente e intelectualmente, en su conjunción. O tal vez es un tema cultural mío, subjetivo, y soy como un niño que solo aprendió a comer endecasílabos. Puede ser. Pero no me digas que no se te queda en la boca, lo repites yendo a trabajar en el coche, en el ascensor, con delectación, se te queda, te obsesiona. Esa es la potencia del ritmo, en mi opinión. Y aquí discrepo con Manuel: si se expresara este pensamiento en prosa no tendría la misma belleza. Tendría otra belleza.
Me gusta mucho el debate.
Un abrazo.
-
- Mensajes: 13275
- Registrado: Sab, 29 Dic 2007 14:18
- Ubicación: España - Bilbao
Re: Participa aquí mismo, en la musicalidad en el poema
Link a un vídeo donde un rapsoda recita el poema 14 de Neruda.
Muy hermoso
-
- Mensajes: 13275
- Registrado: Sab, 29 Dic 2007 14:18
- Ubicación: España - Bilbao
Re: Participa aquí mismo, en la musicalidad en el poema
"La canción desesperada" de Neruda.
Recita Rosa Iglesias
-
- Mensajes: 13275
- Registrado: Sab, 29 Dic 2007 14:18
- Ubicación: España - Bilbao
Re: Participa aquí mismo, en la musicalidad en el poema
Poema de Antonio Gamoneda recitado por Tomás Galindo
Pablo:
No he encontrado el poema de Gamoneda que te gusta tanto, pero he encontrado este que es muy bueno también.
Un abrazo
Ana
-
- Mensajes: 3342
- Registrado: Lun, 11 May 2009 18:31
Re: Participa aquí mismo, en la musicalidad en el poema
Y también aclarar que, como se puede ver, Manuel, en ese párrafo que citas escrito por mí, me refiero de forma evidente al campo de la música y no al de la poesía, cuanto más si viene precedido de otras partes en que digo “la obra musical en toda su dimensión”. Es explícito, y si no lo fuera queda implícito cuando digo, “ideario musical de la obra completa”, o “fuera del campo de la música…”. O sea, que nada tiene que ver con lo que has podido interpretar.
-
- Mensajes: 4458
- Registrado: Sab, 10 Dic 2011 16:21
- Ubicación: Madrid
Re: Participa aquí mismo, en la musicalidad en el poema
Ignacio Mincholed escribió:A la vista de lo que leo, “La música, la musicalidad, es lo que recorre todo el poema”, conviene aclarar que música y musicalidad no son la misma cosa, menos referidas a un poema. En un poema no hay música, si acaso hay eso que llamamos musicalidad. No conviene confundir los términos, ya que son determinantes. Del movimiento del mar decimos que tiene musicalidad en su vaivén de olas, pero no produce música. También lo decimos del rumor del viento o de una voz humana que presenta ciertas inflexiones y acentos al hablar, pero tampoco producen música.
Y también aclarar que, como se puede ver, Manuel, en ese párrafo que citas escrito por mí, me refiero de forma evidente al campo de la música y no al de la poesía, cuanto más si viene precedido de otras partes en que digo “la obra musical en toda su dimensión”. Es explícito, y si no lo fuera queda implícito cuando digo, “ideario musical de la obra completa”, o “fuera del campo de la música…”. O sea, que nada tiene que ver con lo que has podido interpretar.
No, no confundo los términos de música y musicalidad. Creo que en un poema podemos hablar de los dos. De música, como conjuntos de sonidos agradables. No realizados por instrumentos musicales, pero sí por palabras, porque estas producen sonido (en el cerebro cuando se leen sin voz, y en el oído cuando se leen en voz alta). Es la cualidad de agradable lo que diferencia la música del ruido. Naturalmente, para mí, hay muchos poemas que tienen música.
Y también se puede hablar de musicalidad, de ella estamos hablando todo el rato. Puede que no tengamos una palabra mejor para expresar lo que queremos decir.
En lo relativo a mi mala interpretación de tus palabras, creo que tienes razón. Pero no está mal, porque eso me ha servido para exponer con algo más de claridad mi opinión.