Hola, Enrique.enrique sanmol escribió: ↑Dom, 10 Nov 2024 10:44Es curioso cómo el tiempo y otros acontecimientos van borrando de la primera línea de noticias las guerras, injusticias y catástrofes que sacuden a este mundo herido... Al autócrata infame de Maduro parece que la modificación trilera del resultado de las urnas y la consiguiente represión de su pueblo vaya a permitirle a él y a sus corruptos adláteres seguir estafando al pueblo venezolano (tal y como también ocurre en Rusia, o en Korea del Norte, o incluso en China).Ara López escribió: ↑Jue, 01 Ago 2024 19:53 La lluvia despliega su velo,
protege el silencio devastador
y trata de enfriar el cemento.
Las calles
a merced de las hojas secas
sólo por unas horas,
sólo para rezar,
sólo para maldecir.
El valor tumba estatuas
una vez erguidas por cobardes,
y, como un tambor de guerra,
en el vacío del vientre materno
el eco de la justicia retumba.
Los buenos son más
pero a los malditos les importa menos,
y los nombres cubiertos de esperanza
conocerán la fuerza de la maldad
y nunca volverán a casa.
Morir por la libertad,
nadie quiere morir.
Llorar sobre la sangre del amigo,
nadie quiere morir.
Alzar la voz sobre los disparos,
nadie quiere morir.
Salimos a contarnos en urnas
para no acabar en fosas comunes.
Lamentablemente lo que vende es lo inmediato, ya apenas comentamos las aberraciones que sucedieron y siguen sucediendo en Ucrania, o a los palestinos en la franja de Gaza, o en Siria... Ahora, por unos días, aquí en España es portada la tragedia de L'Horta Sud en Valencia, ocurrida por una catástrofe natural pero que ha puesto de manifiesto la negligencia de nuestros gobiernos autonómico y central.
En una semanas nos aburriremos de seguir hablando de ello y, lamentablemente, el daño, la injusticia, la represión y la muerte continuarán en tantos y tantos lugares. No hay justicia en este mundo... y dudo de que haya otro.
Tu poema es un grito desgarrador de rabia frente a esa injusticia que cala en el lector, lamentablemente la solidaridad no mueve gobiernos en este mundo corrupto en el que los intereses económicos y de bloques son los que mueven los hilos.
Perdón por la deriva. El poema magnífico. Un cordial saludo.
Entiendo a lo que te refieres pero así somos... Sobreescribimos constantemente lo bueno y lo malo de la vida. Olvidamos el desastre de una guerra con la misma facilidad con que olvidamos el cumpleaños de un primo. No digo que esté bien, sólo creo que así somos.
Me alegra que te haya gustado el poema.
Un abrazo.