El buscador de la verdad

[Marisa Peral]

...
Soy un buscador de la verdad.
Arrastro este sino
como el tatuaje encarnado de los amantes que huyen,
arrepentidos,
dejando su piel de náufragos en marejada ardiente
tras su atrevido aliento.

Cargo conmigo un macuto imaginario de herramientas
inservibles,
que uso con frecuencia cuando el corazón se acelera
para tratar de mirar adentro
-desde tan fuera-
pero son como lentes sin vidrio
de un miope desorientado
que rebusca el contorno de la realidad entre tinieblas.

Por eso, si me ves forzar la mirada
en la calle que retumba
rebosante y vacía, es porque intuyo
que viene rodando hacia mí un pedazo de vida,
y gritan mis ojos, en el silencio:
cualquier cosa,
¡trae contigo lo que sea!
pero que sea de verdad…
No se vivir a medias.
Recorriendo el mundo voy,
libre entre cadenas,
como un pájaro de tierra.
.
.
.

Leerte siempre es una fiesta, querido amigo, y estos versos lo demuestran. Cada estrofa tiene momentos reseñables y los últimos versos una joya para guardar en el corazón.
Gracias por venir y por el regalo de tu poesía.

Abrazos y un beso.