La Editorial Alaire, auspiciada por la Academia de Poesía Alaire, pone gratuitamente a disposición de sus foristas registrados, varios foros de poesía, prosa literaria, debates…, para que puedan publicar sus obras e interactuar entre ellos, así como, la tienda de libros donde se muestran las publicaciones, tanto en papel como en formato digital, estos mediante descarga gratuita. La razón de ser de nuestros foros se centra en promocionar la poesía, mediante las obras de los autores que participan en la plataforma de la Academia de Poesía Alaire. La promoción de la poesía, a nivel del mundo de habla hispana, conlleva una enorme responsabilidad, por ello, pedimos la máxima implicación de todos los miembros de Alaire. Vale recordar al gran maestro Dumas: uno para todos y todos para uno. Muchas gracias por todo, queridos compañeros.
En memoria de Blanca Sandino, poeta nacida en Oviedo, el 14 de enero de 1946, y fallecida en Cádiz, el 23 de mayo de 2009, que fue una destacada forista de Alaire y miembro cofundador del Grupo Poético Alaire.
Me alegra mucho que te haya gustado. Gracias, Aubriel. Muchas.
Blanca
PD
Aubriel Camila de la Prad escribió:
Bellísimo, Blanca! Pero así: BE-LLI-SI-MO!!!
Te aplaudo fuerte una vez más, né.
Y sí, el amarillo de Nápoles es un color muy particular, es el color de las rosas té (como vos bien dijiste) y como las rosas té me fascinan, ese amarillo que no es amarillo también.
Y yo te digo SI a tus versos, que llenan, que transmiten entre las palabras todo el sentimiento, eso que con estos vértigos que me han invadido no lo disfruto como debiera.
Mi admiración y un abrazo
Pilar
... más bien veo que aparece continuamente la esa duda con que a veces alanceamos determinados episodios sin saber muy bien qué ha de pasar o cuál ( "sí, o no" ) ha de ser mejor, más oportuno, incluiso ese silencio final en que se pronuncia el nombre; es un ejercicio sicológico profundo, amiga, grande; un abrazo; Orión
"... nunca se da de lo que se tiene, sino de lo que se es".
Gracias, Ana. Tenía que asistir esta mañana a una conferencia sobre la situación, el desarraigo, la violencia, la falta de derechos civiles, y tantos otros etcéteras, que soportan las mujeres colombianas, así que te agradezco el silencio. En fin, después de asistir a la conferencia, creo que lo único que necesito es silencio. Sí, eso es lo que me hace falta hoy, silencio interno.
Gracias, mi niña. Muchas.
Blanca
PD
En mi respuesta a José Manuel, intenté explicar lo del título. Y Alonso también lo ha hecho (mejor que yo)
Ana Villalobos Carballo escribió:Como dice Marian, un poema que merece todo el silencio para poder disfrutar de toda la emoción que provocan sus versos. Un auténtico derroche de sensibilidad, querida amiga, con un principio y un final de altos vuelos.
Un beso grande que te llegue al corazón
Ana
Ah, que me olvidaba que yo tampoco entiendo el título, anda y explicalo ya, que ya somos tres los que nos quedamos a dos velas. ¿O a los títulos les pasa como a los poemas que no se pueden explicar? jajaj.
El título no cuadra mucho, tienes razón. Como le digo a Ana, si lees mi respuesta a José Manuel, verás que he intentado explicarlo. Y Alonso lo ha resumido estupendamente.
Gracias de nuevo, lagun maitea.
Blanca
Julio González Alonso escribió:Poema lleno de aciertos muy notables en las imágenes escogidas y hermoso en su cadencia que acompaña la sensación de nostalgia, de amor, de tiempo perdido, de ausencias y presencias que lo llenan todo.
Lo único que no me cuadra es el título que no está cogido entre paréntesis. Me ha despistado y es lo único que no he conseguido entender de un poema que es claro -afortunadamente- y bellamente transparente.
Con un abrazo de osito en medio del invierno.
Salud.
Gracias, Alonso. Muchas gracias por comprenderlo tan bien (o por comprenderme). Y sí, como bien dices, uno de esos archivos traviesos, que en este caso me sirvió para recuperar lo que había escrito. Cosas del Windows y sus neuras.
Me alegra conocer tu opinión.
Blanca
Alonso de Molina escribió:de uno de esos archivos que por traviesos están rotos, dañados, o simplemente
permanecen temporales en el limbo hasta que un día hacemos limpieza de armarios virtuales y los borramos y que en esta ocasión tal vez te ha valido de inspiración; el inicio es rotundo y creo que enfoca todo el conjunto del poema, lo resume y concluye practicamente:
Te digo no, y se me escapa el alma en cada sí que no pronuncio
Te digo no, y se me escapa el alma en cada sí que no pronuncio.
……….Genial, de una naturalidad pasmosa. Tal vez un exponente claro del verso que puede abrir fronteras a la expresión poética, instalarla en los estratos donde jamás estuvo; a la altura de cualquier mortal que sepa leer correctamente. Por otro lado, el ritmo es sensacional, como no podía ser de otra manera.
Un suspiro naufraga en la penumbra de ti que hay en mi piel ausente.
………….Quizá se podría retocar “de ti que hay en mi”, no sé, muchas partículas, demasiado fácil. De todas maneras el resultado no está mal.
Mis manos lo salvan (lo mecen, cobijan y serenan)
mientras el corazón se rinde reverente,
ante el misterio de un pensamiento aún no nacido,
de un pensamiento aún no pronunciado.
……….. Fíjate que esta estrofa no tiene nada de particular, si no es por su ritmo pobre.
Fatalmente, el ritmo está tan unido al verso que los dos forman el poema. Si uno falla, el otro también falla. Hablo del ritmo, por esa simbiosis a la que me refiero, pero podría hablar de la combinación de palabras y diría lo mismo (reverente, podría ser un ejemplo de lo que digo).
Te digo no al son que rompe silencio y soledades, metálico y profundo,
de las campanas anunciando la Misa matutina:
aturden con su voz -bronce fundido- la luz por estrenar de la mañana
que habrá de ser testigo, si Dios no lo remedia, de un día más sin ti,
de un día más conmigo.
…….La estrofa comienza dubitativa con ese “Te digo no, al son…”; sigue con un segundo verso demasiado prosaico, aunque es cierto que cumple su función de enunciar claramente.
El tercer verso es una avanzadilla de los dos últimos, a mi juicio, dos versos geniales.
Fíjate en el ritmo de los tres últimos versos, ciertamente muy bueno, coincidiendo un fondo bellísimo con una forma magistral.
Te digo no, y duermo -sueño- el tiempo que me sobra
(un tiempo gris y frío)
o lo dedico a contemplar el árbol que se asoma a mi ventana,
exultante de vida, que hunde sus raíces en la tierra, y lo envidio.
Él no sabe de ausencias ni de penas, ni puede recordar el imperceptible temblor
-adagio sostenido por la sutil unidad que nos separa-
de la mano hendiendo en su serse de árbol centenario, o en su serse corteza, un adiós.
Te digo no: sin prisa, inmarcesible, ajena al desaliento,
al angustioso grito de sus hojas,
que clama libertad, y al brillo sepulcral de las estrellas.
…………. Este grupo versal se me antoja dificilísimo. Creo que se puede mejorar. Alternas aciertos, con definiciones un tanto apresuradas. Yo ajustaría la cadena fónica y el ritmo, y con ello se lograría ajustar el resultado ( “gris y frío”, tal vez merezcan un toquecito).
Te digo no, porque quizá desee decir sí, o desee morir,
en cada uno de los síes
que sólo en mi silencio,
te pronuncio.
Yo vería la manera de evitar “desee” y “síes”, digamos que son recursos facilones, para una poeta de tu talla.
En fin, ha sido un placer leerte. Felicidades por el poema.
Recibe un fuerte abrazo.
