Pétalos negros de abril
Moderadores: J. J. Martínez Ferreiro, Rafel Calle
Pétalos negros de abril
La noche es una amapola negra
deshojada para mi.
No puedo esconder el luto,
¿lo entiendes querida?
El beso qué cayó seco,
la caricia separada,
qué en la avenida húmeda
hizo crecer un adiós
parecido a un álamo qué recordaba de niño,
un inalcanzable cúmulo de espadas
temblantes en el viento,
en mi mirada temerosa
dos amapolas negras,
el reflejo moribundo del día
recostado en mis ojos.
Puedo recordarte cuando morían los árboles,
cuando nacía en la superficie del rocío
la alfombra por donde cruzabas,
el brote de tus dedos alcanzando mi espalda,
mi mano marchita treinta y ocho veces,
de tu lluvia,
que mece mi cabeza hasta dormirla,
donde nadie llega,
donde los gatos traen lo agrietado del cielo colgando en la cola,
arrastrando hacia adentro
los pétalos negros de abril.
se me empezó a morir como un niño en la noche,
y yo mismo era un niño con mis años a cuestas por las calles, un ángel
ciego, terrestre, oscuro,
con mi pecado adentro, con tu belleza cruel, y la justicia
sacándome los ojos por haberte mirado." Gonzalo Rojas
-
- Mensajes: 15528
- Registrado: Dom, 11 May 2008 20:04
- Ubicación: Estados Unidos
- Contactar:
Re: Pétalos negros de abril
Me conmueve tu profundo lirismo, Satir. Tus imagenes son nuevas, autenticas, y esa propiedad te destaca ante mis ojos. Estas en uno de mis escritos como el observador serio de una pre-existencia. Abrazos. ERAA. Satír escribió: ↑Mar, 02 May 2023 19:37 Solo sé atardecer,
La noche es una amapola negra
deshojada para mi.
No puedo esconder el luto,
¿lo entiendes querida?
El beso qué cayó seco,
la caricia separada,
qué en la avenida húmeda
hizo crecer un adiós
parecido a un álamo qué recordaba de niño,
un inalcanzable cúmulo de espadas
temblantes en el viento,
en mi mirada temerosa
dos amapolas negras,
el reflejo moribundo del día
recostado en mis ojos.
Puedo recordarte cuando morían los árboles,
cuando nacía en la superficie del rocío
la alfombra por donde cruzabas,
el brote de tus dedos alcanzando mi espalda,
mi mano marchita treinta y ocho veces,
de tu lluvia,
que mece mi cabeza hasta dormirla,
donde nadie llega,
donde los gatos traen lo agrietado del cielo colgando en la cola,
arrastrando hacia adentro
los pétalos negros de abril.
- Ramón Castro Méndez
- Mensajes: 6134
- Registrado: Mar, 17 May 2016 8:24
Re: Pétalos negros de abril
Te felicito.
Un fuerte abrazo.
que te tortura el no poder escribir
o que
no puedes escribir porque estás torturado?
¿Dices
que estos tiempos te han convertido en un escéptico
o que
estos tiempos confirman tu escepticismo?
SAM SHEPARD
- Carmela Viñas
- Mensajes: 1549
- Registrado: Vie, 10 Feb 2023 12:20
Re: Pétalos negros de abril
Bello poema. He disfrutado la lectura.
Un abrazo.
Recinto de las divinidades
en el vestir de la metáfora.
Encaje de su magnificencia.
https://filan2.blogspot.com/?m=1
-
- Mensajes: 29946
- Registrado: Mié, 09 Abr 2008 10:21
Re: Pétalos negros de abril
Abrazos y salud.
- xaime oroza carballo
- Mensajes: 3587
- Registrado: Mar, 16 Oct 2012 11:56
Re: Pétalos negros de abril
Fonda aperta.
Re: Pétalos negros de abril
Muchas gracias ERA, me encantaría leer lo que me dices.E. R. Aristy escribió: ↑Mié, 03 May 2023 11:43Me conmueve tu profundo lirismo, Satir. Tus imagenes son nuevas, autenticas, y esa propiedad te destaca ante mis ojos. Estas en uno de mis escritos como el observador serio de una pre-existencia. Abrazos. ERAA. Satír escribió: ↑Mar, 02 May 2023 19:37 Solo sé atardecer,
La noche es una amapola negra
deshojada para mi.
No puedo esconder el luto,
¿lo entiendes querida?
El beso qué cayó seco,
la caricia separada,
qué en la avenida húmeda
hizo crecer un adiós
parecido a un álamo qué recordaba de niño,
un inalcanzable cúmulo de espadas
temblantes en el viento,
en mi mirada temerosa
dos amapolas negras,
el reflejo moribundo del día
recostado en mis ojos.
Puedo recordarte cuando morían los árboles,
cuando nacía en la superficie del rocío
la alfombra por donde cruzabas,
el brote de tus dedos alcanzando mi espalda,
mi mano marchita treinta y ocho veces,
de tu lluvia,
que mece mi cabeza hasta dormirla,
donde nadie llega,
donde los gatos traen lo agrietado del cielo colgando en la cola,
arrastrando hacia adentro
los pétalos negros de abril.
Te dejo un abrazo.
Satír.
se me empezó a morir como un niño en la noche,
y yo mismo era un niño con mis años a cuestas por las calles, un ángel
ciego, terrestre, oscuro,
con mi pecado adentro, con tu belleza cruel, y la justicia
sacándome los ojos por haberte mirado." Gonzalo Rojas