Pilar Morte escribió: ↑Mié, 18 Ene 2023 20:18
1.- Me dijo lo que le enseñaron los pájaros: vinimos a jugar.
Yo mudé el narcisismo por el juego. Así entierro vanidades,
y muero menos veces.
Me vivo en la resurrección
de los espejos que se mimetizan con la naturaleza.
Dejé de usar las palabras de los sueños con brújula vacía
para hablar el lenguaje del cobijo y el afecto.
Mi poliedro refulge en cuatro perfiles;
ellos despiertan mis albas.
2.- Descanso, doy un respiro para comprender,
y cuando, de espaldas al tedio, los quehaceres
dan fin a la función del día, me refugio en el juego,
en la alegría compartida.
Pero… ¿y los otros?
los que sienten goteras sin poder controlar la gárgola
de lluvia torrencial, se bañan en aire
y se entregan a la vida de espaldas a la muerte,
sin más misión
que insistir, como los pájaros, en rutas diferentes
para descubrir las bayas
que abandonaron los adelantados.
1.- El primer día que despliegas alas ante nortes disímiles,
estrenas emociones y crees encontrar
el sentido de la vida,
vas subiendo escaleras, salas de ejecutivos fríos
que, desde el sillón y tras la cristalera, creen conocer
cómo respira el mundo, sin comprender
que al poner puertas a la tierra,
muchos paisajes se hacen invisibles, y se olvida
como auxiliar al que se ahoga
cuando está perdiendo el aire.
Cuesta calcinar
la luz encendida del egoísmo
pero la libertad es el sueño.
1.- Mi verdad es ésta:
si te desprendes de las túnicas
que no quitan el frío,
llegarás al centro
donde el amor y el juego resucitan.
Será la belleza una razón del alma,
y la poesía
quedará acrisolada en ti.
2.- Comencé a sonreír.