Las cosas de Dios...

[Jorge Salvador]

Que a todos la parienta nos los pone
más tarde o más temprano, ¿quién lo niega?
pero oiga, si cocina, plancha y friega,
purgar las cornamentas, ¿qué supone?

Cualquier buen matrimonio se compone
de un ciego, la rutina y una ciega,
jugando en el hogar que les congrega
a todo lo que el diablo les propone.

¿Qué hiciste, Dios, por Dios? ¿tú qué bebiste
durante la Creación? ¿por qué elegiste
al hombre y la mujer como ejemplares

para ejemplificar la convivencia?
La una haciendo ley su conveniencia
y el otro dando tumbos por los bares...

[Ana Estepa]

Qué buen soneto. Divertido e ingenioso.

Reflejas la hipocresía de esos acuerdos tácitos que rigen las normas de algunos matrimonios "como dios manda", de ayer, hoy y de siempre.

Me gustó leerte.

[Fernando Gonzalez]

Leer sus poemas siempre termina enseñándome algo. Preguntitas que quisiéramos Dios responda como no.

Siempre un placer.

[Ana Muela Sopeña]

Qué bien escribes, Jorge:

Tu soneto es genial. Muy irónico. Tiene mucho de verdad.

Los matrimonios a a veces son un compendio de mentiras aceptadas.

Felicitaciones
Un abrazo
Ana

[Ana García]

Para que el amor se escape por la ventana no hay nada mejor que el matrimonio y los bares tipo bodeguilla.
Si es que lo has clavado. Muy divertida está crítica social.
Te felicito.
Un abrazo.

[Manuel Rubio]

Que a todos la parienta nos los pone
más tarde o más temprano, ¿quién lo niega?
pero oiga, si cocina, plancha y friega,
purgar las cornamentas, ¿qué supone?

Cualquier buen matrimonio se compone
de un ciego, la rutina y una ciega,
jugando en el hogar que les congrega
a todo lo que el diablo les propone.

¿Qué hiciste, Dios, por Dios? ¿tú qué bebiste
durante la Creación? ¿por qué elegiste
al hombre y la mujer como ejemplares

para ejemplificar la convivencia?
La una haciendo ley su conveniencia
y el otro dando tumbos por los bares...

”Los otros dando tumbos por los bares”... no sé yo quien visita más los bares en estos últimos tiempos, se juntan tres o cuatro Marías para el desayuno, y el marido tiene que hacerse una tortilla a la francesa, porque no les da tiempo (a ellas) de preparar el almuerzo.
Hay gente pa tó.

El primer verso acabó con el típico tópico de: "La esperanza es lo último que se pierde"... será cosa de las vacunas.

Abrazos.

[Simon Abadia]

Un soneto genial y con ironía, que saca la mejor sonrisa.
Abrazos

[Javier Dicenzo]

resumiste la historia de la humanidad con tu poema felicitaciones.

[F. Enrique]

Original y verdaderamente bueno tu soneto, con rimás complicadas que reduces al estado de naturalidad. No voy a decirte que me gustaría escribir un soneto como el tuyo; no debo exigir lo que no he cuidad, pero eso no quita que admire sonetos como el tuyo, de sobras lo merece, es profundo como el dios que duda de su existencia y los poemas del Quevedo más sombrío.

Un abrazo.

[Jorge Salvador]

Qué buen soneto. Divertido e ingenioso.

Reflejas la hipocresía de esos acuerdos tácitos que rigen las normas de algunos matrimonios "como dios manda", de ayer, hoy y de siempre.

Me gustó leerte.

Gracias, Ana. La experiencia adquirida después de dos matrimonios fracasados, de los cuales salí esquilado, tal vez no me permita ser muy objetivo en cuanto a la visión de este santo sacramento, pero en fin, así es como lo veo y así es como lo cuento. Pero por supuesto, de todo habrá...
Un abrazo

[Jorge Salvador]

Leer sus poemas siempre termina enseñándome algo. Preguntitas que quisiéramos Dios responda como no.

Siempre un placer.

Un honor, Fernando. Mi opinión es que Dios siempre responde, pero nunca nos dice lo que queremos oír, y además, su respuesta suele tardar muchos años en llegar, con el agravante de que la mayoría de veces no la escuchamos. En fin... las cosas de Dios.
El placer es mío, compañero

[Jorge Salvador]

Qué bien escribes, Jorge:

Tu soneto es genial. Muy irónico. Tiene mucho de verdad.

Los matrimonios a a veces son un compendio de mentiras aceptadas.

Felicitaciones
Un abrazo
Ana

Tú sí que escribes bien, Ana. Genial tu frase de que los matrimonios son un compendio de mentiras aceptadas...
Un placer, compañera. Vaya mi abrazo de vuelta

[Jorge Salvador]

Para que el amor se escape por la ventana no hay nada mejor que el matrimonio y los bares tipo bodeguilla.
Si es que lo has clavado. Muy divertida está crítica social.
Te felicito.
Un abrazo.

Así es, Ana. Pero también te digo que el matrimonio es el mejor gimnasio psicológico que existe. Ahí es donde de verdad somos nosotros en toda su extensión, por eso nadie nos aguanta.
Muchas gracias, compañera. Un abrazo

[Jorge Salvador]

Que a todos la parienta nos los pone
más tarde o más temprano, ¿quién lo niega?
pero oiga, si cocina, plancha y friega,
purgar las cornamentas, ¿qué supone?

Cualquier buen matrimonio se compone
de un ciego, la rutina y una ciega,
jugando en el hogar que les congrega
a todo lo que el diablo les propone.

¿Qué hiciste, Dios, por Dios? ¿tú qué bebiste
durante la Creación? ¿por qué elegiste
al hombre y la mujer como ejemplares

para ejemplificar la convivencia?
La una haciendo ley su conveniencia
y el otro dando tumbos por los bares...

”Los otros dando tumbos por los bares”... no sé yo quien visita más los bares en estos últimos tiempos, se juntan tres o cuatro Marías para el desayuno, y el marido tiene que hacerse una tortilla a la francesa, porque no les da tiempo (a ellas) de preparar el almuerzo.
Hay gente pa tó.

El primer verso acabó con el típico tópico de: "La esperanza es lo último que se pierde"... será cosa de las vacunas.

Abrazos.

Sí, Manolo, hay gente pa tó. Semos muchos en el mundo, o eso al menos dice Bill Gates, a quien el coronavirus guarde muchos años. Quiera Dios que ese gran mecenas de la humanidad no permita nunca que nos falte una vacuna ni alguien dispuesto a pincharnosla

[Jorge Salvador]

Un soneto genial y con ironía, que saca la mejor sonrisa.
Abrazos

Gracias, Simon. Celebro haberte provocado una sonrisa