Ansiedad

[Ricardo López Castro]

cuando la casa espera
mis pasos son más rápidos
mi zancada se alarga
mi aliento me golpea con más intensidad
las personas son solo escollos que me estresan
evito las miradas y los roces
me detengo tan solo en los semáforos

con

prisa
reconozco que no soy un viandante

un autómata mueve
mis brazos y mis piernas
no tengo wifi
ni el plato de comida
ya sobre la mesa
no me puedo sentar en la butaca
ésa tan confortable donde duermo la mona

llego
como si Dios me hubiese bendecido
como si los abismos callejeros
esa gente que mira por encima del hombro
que sonríe
que emite carcajadas
que no respeta el código de honor
cuya moral es siempre cuestionable
me hubiese condenado al ostracismo

siento
el calor del hogar
de mis cambios de ideas y ocurrencias
y la necesidad de mostrar mis idilios
necedades
bobadas
espurios
sandeces

justo antes de cerrar mis sesos
con belcro con cordones cremallera y esposas
de mandarlos al frente de un poema romántico
pegajoso
ramplón
misericorde
vomitivo

y colgarlo en la red como primicia
todo para llevarme la enhorabuena el juicio
de quien no me conoce tres carajos

el colmo de los colmos
que siempre quiero más
y pienso que la gente no sabe valorarme

una baja autoestima
y un millón de trabajos
y paso por la vida cargado de proyectos
que muestran mi talento para una minoría interminable
todo porque he perdido mi experiencia vital

moraleja
cuanto más Dios me creo
más me aburro y abuso
como si de un purista se tratase

evito malos versos
con los que despertar
desayuno lo mismo
me visto con la misma ansiedad y torpeza
vuelvo al mismo lugar

sin comida en la mesa
sin wifi
sin sandeces



sin rodeos

[Rafel Calle]

Arriba con este nuevo e interesante trabajo, amigo Ricardo.
Abrazos.

[Hallie Hernández Alfaro]

Uff mucha miga en este poema que al comenzar, muestra casi todos los síntomas de la angustiante hiperventilación, una hiperventilación del ideario, de las otras visiones, de la propia fuerza de pensamiento.
Las imágenes se disparan como impulsos nerviosos y la razón logra re-acomodar el ojo...o quizá solamente desnudarlo más y sacudirlo con las cosas muy claras.
En tus trabajos siempre hay lugar para la estética del asombro, de la verdad en su salto triple mortal y de la afectividad girando sobre puntillas.

Gracias por estar.

Abrazo y felicitaciones sinceras, querido amigo.

[Ricardo López Castro]

Gracias miles amigo Rafel y amiga Hallie, por dar color a este "más difícil todavía".
Abrazos y gracias por solidarizaros con esta versión de mí.
Abrazos y felicidad para amb@s.

[José Manuel F. Febles]

Queridocompañero y amigo poético, me ha gustado mucho leer este inmensdo poema que ya, Hallie te ha comentado con gran criierio- Motivos de salud me impiden actuar con la normalidad de siempre.

Desde la soledad de mi isla, un fuerte abrazo.

José MAnuel F. Febles

[Ricardo López Castro]

Otro abrazo para ti amigo José.
Espero que pronto te encuentres mejor.
Gracias por compartir tus impresiones a pesar de tu falta de salud.
Y gracias por tus halagadoras palabras.

[J. J. Martínez Ferreiro]

“ cuando la casa espera
mis pasos son más rápidos
mi zancada se alarga
mi aliento me golpea con más intensidad
las personas son solo escollos que me estresan
evito las miradas y los roces
me detengo tan solo en los semáforos”

Una propuesta poética muy personal y original. Siempre intentando dar un paso adelante, amigo Ricardo.
Todo un placer de lectura.

Abrazos.

[Ricardo López Castro]

Gracias por acudir a este clamor tan personal, como tú dices, y con el que espero haber plasmado el verdadero concepto de la ansiedad, sobretodo a nivel social, universal, tan a la orden del día.
Abrazos y felicidad, amigo Ferreiro!

[xaime oroza carballo]

cuando la casa espera
mis pasos son más rápidos
mi zancada se alarga
mi aliento me golpea con más intensidad
las personas son solo escollos que me estresan
evito las miradas y los roces
me detengo tan solo en los semáforos

con

prisa
reconozco que no soy un viandante

un autómata mueve
mis brazos y mis piernas
no tengo wifi
ni el plato de comida
ya sobre la mesa
no me puedo sentar en la butaca
ésa tan confortable donde duermo la mona

llego
como si Dios me hubiese bendecido
como si los abismos callejeros
esa gente que mira por encima del hombro
que sonríe
que emite carcajadas
que no respeta el código de honor
cuya moral es siempre cuestionable
me hubiese condenado al ostracismo

siento
el calor del hogar
de mis cambios de ideas y ocurrencias
y la necesidad de mostrar mis idilios
necedades
bobadas
espurios
sandeces

justo antes de cerrar mis sesos
con belcro con cordones cremallera y esposas
de mandarlos al frente de un poema romántico
pegajoso
ramplón
misericorde
vomitivo

y colgarlo en la red como primicia
todo para llevarme la enhorabuena el juicio
de quien no me conoce tres carajos

el colmo de los colmos
que siempre quiero más
y pienso que la gente no sabe valorarme

una baja autoestima
y un millón de trabajos
y paso por la vida cargado de proyectos
que muestran mi talento para una minoría interminable
todo porque he perdido mi experiencia vital

moraleja
cuanto más Dios me creo
más me aburro y abuso
como si de un purista se tratase

evito malos versos
con los que despertar
desayuno lo mismo
me visto con la misma ansiedad y torpeza
vuelvo al mismo lugar

sin comida en la mesa
sin wifi
sin sandeces



sin rodeos

Ayer me dio la hora y no pude enviar mi comentario. Decía, y digo, que comparto y estoy totalmente de acuerdo con él:

" sin comida en la mesa
sin wifi
sin sandeces



sin rodeos"

Gracias, compañero.
Un abrazo.

[Ricardo López Castro]

Gracias a ti, como siempre, amigo xaime.
Siempre dejando huella allá por donde pasas.
Gracias.
Abrazos y felicidad.