Gracias, Ignacio, un honor...Ignacio Mincholed escribió: ↑Dom, 18 Jul 2021 12:53 Enhorabuena, Ramón. Muy preciso este poema.
Buen verano. Un abrazo.
Ignacio
Feliz verano también para ti. Abrazo fuerte
Moderadores: J. J. Martínez Ferreiro, Rafel Calle
Gracias, Ignacio, un honor...Ignacio Mincholed escribió: ↑Dom, 18 Jul 2021 12:53 Enhorabuena, Ramón. Muy preciso este poema.
Buen verano. Un abrazo.
Ignacio
Hola, Javier, en verdad es un poema que tenía casi olvidado y me gustó volver a leer.Javier Bustamante escribió: ↑Dom, 18 Jul 2021 14:03 Felicidades por tan reflexivo poema y por el reconocimiento merecido a estás letras que tratan el acontecer actual de una manera muy inspirada.
Saludos
Javier
Muchas gracias, estimado Ferreiro. Siempre un gusto compartir contigo.J. J. Martínez Ferreiro escribió: ↑Dom, 18 Jul 2021 15:24 NORABOA, por este merecido reconocimiento a tan excepcional poema.
Todo un placer de lectura, amigo Ramón.
Abrazos y salud.
Abrazo grande, Marisa. Gracias por pasarte y dejar tu bonita huella en estas letrasMarisa Peral escribió: ↑Dom, 18 Jul 2021 20:45 Queda, querido amigo, volver a felicitarte por este poema y por la merecida distinción.
Me gusta verlo ahí arriba.
Abrazo grande.
Me parece un poema agradable. Gracias por la lectura. Saludos.Jorge Salvador escribió: ↑Sab, 06 Jun 2020 10:49 Quedan los sedimentos
flotando en una atmósfera fangosa;
la obsesión del recuerdo
por componer los hechos como jamás pasaron
y una tristeza abierta a lo que surja.
Queda restituirse,
oxigenar los órganos vitales
y salir a buscar la fe que mueve las montañas
para que el diablo empiece a tener dudas.
Quedan las consecuencias,
lo que aunque pudo ser jamás fue sido
y un horizonte atado al mismo mar de entonces.
Lo irreparable,
queda lo irreparable estrictamente,
la soledad vagando entre palabras sordas,
barcos a la deriva en la garganta
y los restos del último naufragio…
Mi enhorabuena JorgeJorge Salvador escribió: ↑Sab, 06 Jun 2020 10:49 Quedan los sedimentos
flotando en una atmósfera fangosa;
la obsesión del recuerdo
por componer los hechos como jamás pasaron
y una tristeza abierta a lo que surja.
Queda restituirse,
oxigenar los órganos vitales
y salir a buscar la fe que mueve las montañas
para que el diablo empiece a tener dudas.
Quedan las consecuencias,
lo que aunque pudo ser jamás fue sido
y un horizonte atado al mismo mar de entonces.
Lo irreparable,
queda lo irreparable estrictamente,
la soledad vagando entre palabras sordas,
barcos a la deriva en la garganta
y los restos del último naufragio…
Rosa, muchísimas gracias por tu huella y un abrazo de vueltaRosa Marzal escribió: ↑Lun, 19 Jul 2021 18:06 Enhorabuena por este excelente trabajo y por el merecido reconocimiento, Jorge.
Un abrazo.
Gracias, Javier.
Un verdadero honor, querido Óscar. Celebro que te haya gustado este poema irreparable y agradezco mucho tu siempre valiosísima opinión.Óscar Distéfano escribió: ↑Mar, 20 Jul 2021 3:23 Qué bueno que este poema haya sido reconocido, porque realmente es bueno. Te felicito, amigo, así como felicito a los que votaron por tu reconocimiento, Mis aplausos para ti.
Un abrazo grande.
Óscar
Gracias, Ventura. En verdad esa era la intención cuando escribí este poema. Me gustó mucho tu acertado enfoque a la hora de leerlo e interpretarlo.Ventura Morón escribió: ↑Mar, 20 Jul 2021 17:42 Un placer pasar por tu poema, que se sitúa en ese punto de la pérdida, de tomar consciencia de ella, de buscar las fuerzas...me gusta mucho esa connotación de irreparable que surge, como se liga al sentido del texto.
Enhorabuena, un abrazo
Gracias a ti por pasarte, Fernando. Honor que te gustara. SaludosFernando Gonzalez escribió: ↑Mié, 21 Jul 2021 13:28Me parece un poema agradable. Gracias por la lectura. Saludos.Jorge Salvador escribió: ↑Sab, 06 Jun 2020 10:49 Quedan los sedimentos
flotando en una atmósfera fangosa;
la obsesión del recuerdo
por componer los hechos como jamás pasaron
y una tristeza abierta a lo que surja.
Queda restituirse,
oxigenar los órganos vitales
y salir a buscar la fe que mueve las montañas
para que el diablo empiece a tener dudas.
Quedan las consecuencias,
lo que aunque pudo ser jamás fue sido
y un horizonte atado al mismo mar de entonces.
Lo irreparable,
queda lo irreparable estrictamente,
la soledad vagando entre palabras sordas,
barcos a la deriva en la garganta
y los restos del último naufragio…