El amor es una pregunta

[Ricardo López Castro]

Las pulgas saltaban veinte veces su cuerpo,
fui capaz de quererte, pero no de seguir
solo
queriéndote.

Mis latidos en el verso
sonaban como una gaita herida por el viento.

Todos sus agujeros,
todos mis poros,
se abrieron sin pertenecer al espacio.

Hasta tal punto lo hicieron
que se separaron las membranas
de la vida,
y nos unimos…
Ante el silencio,
en un nuevo pináculo de la lírica.

Y ella se acercó, y nos dio, sin extender su mirada,
otra nueva historia.

Dentro de ella, en sus miles de páginas,
se comprendían
el tiempo y la nostalgia,
dentro de un carpe diem
de lo más profundo.

Y el tiempo, que a todo lo llama tiempo,
se introdujo en el último verso.

Un sustituto frenético, vertiginoso,
llamado amor,
capaz de aunar el polvo,
se preguntaba:
fantasía o realidad.
Y lo cierto es que esa pregunta es lo único eterno que poseo.

Y que ahora entiendo perfectamente la postura del tiempo.

[Ramón Castro Méndez]

Si el amor es una pregunta, tú has dado más que bien con la respuesta acertada. Un poema, el tuyo, que me ha entusiasmado. Siempre supe que había buena madera en ti.
Mi aplauso y felicitación, amigo Ricardo, por tan excelentes letras.

Un fuerte abrazo.

[Ricardo López Castro]

Gracias miles amigo Ramón, significa mucho para mí todo lo que me dices.
Gracias, gracias.
Abrazos y felicidad, amigo mío.

[E. R. Aristy]

Las pulgas saltaban veinte veces su cuerpo,
fui capaz de quererte, pero no de seguir
solo
queriéndote.

Mis latidos en el verso
sonaban como una gaita herida por el viento.

Todos sus agujeros,
todos mis poros,
se abrieron sin pertenecer al espacio.

Hasta tal punto lo hicieron
que se separaron las membranas
de la vida,
y nos unimos…
Ante el silencio,
en un nuevo pináculo de la lírica.

Y ella se acercó, y nos dio, sin extender su mirada,
otra nueva historia.

Dentro de ella, en sus miles de páginas,
se comprendían
el tiempo y la nostalgia,
dentro de un carpe diem
de lo más profundo.

Y el tiempo, que a todo lo llama tiempo,
se introdujo en el último verso.

Un sustituto frenético, vertiginoso,
llamado amor,
capaz de aunar el polvo,
se preguntaba:
fantasía o realidad.
Y lo cierto es que esa pregunta es lo único eterno que poseo.

Y que ahora entiendo perfectamente la postura del tiempo.

Desde su sugestivo título, hasta llegar a la postura del tiempo, tu bello poema posa preguntas claves sobre la fantasía y la realidad en la relación amorosa. Un placer de lectura, Ricardo López Castro. Abrazos, ERA

[Ricardo López Castro]

Gracias miles amiga ERA.
Agradezco mucho tu presencia y palabras.
Abrazos y felicidad.

[J. J. Martínez Ferreiro]

Me ha gustado mucho, Ricardo. Sobre todo en estos versos:

“Hasta tal punto lo hicieron
que se separaron las membranas
de la vida,
y nos unimos…
Ante el silencio,
en un nuevo pináculo de la lírica”

Abrazos y salud.

[Ricardo López Castro]

Gracias amigo Ferreiro por tu paso y visión del poema.
Valoro mucho lo que me dices.
Abrazos y felicidad.

[Rafel Calle]

Arriba con este hermoso e interesante trabajo, amigo Ricardo.
Felicidades.
Abrazos.

[Ricardo López Castro]

Gracias miles amigo Rafel.
Celebro tus palabras para este poema.
Abrazos y felicidad.

[Pilar Morte]

Un poema hermoso y original que pregunta y da respuesta al amor. Me gustaron tus versos.
Abrazos

[Ricardo López Castro]

Gracias miles amiga Pilar, por tus palabras para este poema.
Abrazos y felicidad.

[Alonso Vicent]

Parece ser, estoy seguro, que la vida es una gran pregunta; el amor, corazón, piel y poros, las armas de una batalla en la que quedamos expuestos... Y profundizaste, tiempo de por medio.
Me gustó la pregunta convertida en poema de principio a fin.
Un abrazo.

[Ricardo López Castro]

Gracias miles amigo Alonso.
Abrazos y felicidad.