Nijinsky

[Ana Muela Sopeña]

Muchas gracias, Óscar:

Es una vida fascinante. Al casarse con Rómola Pulzsky (bailarina) su amante Serguéi Diaghilev (productor de la compañía de ballet con quien llevaba "saliendo" seis años) se sintió traicionado. Entonces, movido e impulsado por la venganza, expulsó de la compañía a Nijinsky y a su esposa. No contento con eso vetó a Nijinsky en todas las demás compañías de ballet. Nijinsky enloqueció por el dolor. Su esposa le acompañó toda la vida de manicomio en manicomio.

Él escribió unos diarios sobre su "locura". Están publicados.

Una vida alucinante.
Unos sucesos que cercenaron la vida del genio.

Un beso
Ana

[Ana Muela Sopeña]

Muchas gracias, Era, por brindarme tus palabras.

Un fuerte abrazo
Ana

[Rafel Calle]

Muy bello trabajo, amiga Ana, y un poema trufado de brillantez, para relatar los avatares de un genio. Me parece una obra importante en términos rítmico-literarios, digna de figurar entre tus mejores poemas.
Mi más efusiva enhorabuena, Ana, no solo por este enorme trabajo, sino también porque te atreves con todo y de todo sales con nota.
Abrazos, compañera.

[J. J. Martínez Ferreiro]

Un homenaje precioso y brillante. Con un dominio de la imagen realmente espectacular.
Todo un placer de lectura querida amiga.

Un bico.

[Ana Muela Sopeña]

Muchas gracias, Rafel, por tus palabras efusivas.

Abrazos poéticos
Ana

[Rosa Marzal]

Un poema espectacular, Ana. Aplaudo este gran trabajo tuyo.

Abrazos.

[Ana Muela Sopeña]

Muchas gracias, Ferreiro, por tus palabras.

Un fuerte abrazo
Ana

[Ana Muela Sopeña]

Gracias, Rosa, por venir y brindarme tus efusivas palabras.

Un fuerte abrazo
Ana

[F. Enrique]

[BBvideo 560,340][/BBvideo]

Me abandonó la luz
en un siniestro acto de lujuria.
Tuve el mundo a mis pies
y lo perdí.

Tiene tu poema momentos de gran brillantez, Ana. He elegido esta estrofa cuya belleza hizo que me detuviera y perdiera durante un momento el hilo. Creo no equivocarme cuando elijo poner junto a tu inspiración esta canción preciosa de Franco Battiato. Jim Morrison no hubiera puesto ningún problema en firmar esta enigmática estrofa.

Un abrazo.

[Ana Muela Sopeña]

Muchas gracias, F. Enrique, por tu aprecio poético.

Abrazos
Ana