
¿Otra táctica más para romperme la cabeza?
No te creas lo que te digo.
Es más, no te creas lo que no hace que no te creas lo que te digo.
¿Mentira?
¿En serio distingues la realidad?
mientras escribo todo lo contrario,
pues si digo que sé tanto de mí,
debería al menos tener nombre
esto que me hago.
Y sí, niña, lo sé, te gusta como beso,
porque mientras lo hacemos nunca olvidas mi cara
de niño guapo y bueno.
Ni mis piernas atléticas.
Ni mi tacto en el manejo del habla.
Y no siempre diré lo que quieras oír.
Preferirás mentiras muchas veces.
Pues mi amor no es de nadie.
Mi amor es esa puta que finge si le duele.
Mi amor es esa puta que finge que no es puta.
-------------------------------------------------------------------
No me pagues con sueños lo que me mueve a risa.
Te voy a hablar en plata:
"Me la sudas."
No es gracias a ti que tengo dos razones escondidas
para vivir -no me mires así, eso es la vida-.
¿Quién afirma cuál es el sexo más inteligente?
-------------------------------------------------------------------
Aquí no hay cabida para traumas.
La locura jamás será entendida.
Si me muero, jamás será de amor.
Y ya sé que no puedo demostrar otra cosa que no sea Dios.
Que por ello, quizá, solo quizá, me encuentre en punto muerto.
-------------------------------------------------------------------
Hay veces que no compensa ir más allá,
ni siquiera intentarlo.
Tengo mucho que confesarle a mis poemas.
No son letras, ni quejas, ni intenciones lo que escribo.
Lo que soy es lo mismo que intentar que me queje por mis letras.