No soy demasiado aficionado a los poemas que hablan de poesía (salvo en tono humorístico y/o sarcástico) pero tu poema tiene algo especial que lo hace diferente y atractivo a mis ojos y mi gusto. Mis felicitaciones, Roland.Ronald Bonilla escribió:
Maniatado a su metáfora insólita,
irreverente,
fuera de tono,
sube a la torre y se lanza al vacío.
Es cuando el poeta despierta
sudando el suicidio de trenes en la noche.
Y se levanta y saluda al espejo,
abre el vino con parsimonia de soldado
y al abandonar el corcho y olfatear profundo,
vislumbra el cierre a tientas
de su poema,
abierto como la estrellada soledad
por siempre.
Un abrazo.