El muro

[Ana Muela Sopeña]

Agradezco infinitamente tus palabras, José Manuel.

Un fuerte abrazo desde la poesía
Ana

[Guillermo Cumar.]

Se hace sensible la idea y la palabra bajo el insinuante ritmo que toma el verso para condensar que el poema
se contagia de tu pensamiento que reposa en el muro de las satisfacciones.

un abrazo

[Óscar Distéfano]

Un poema muy logrado de exquisito ritmo arromanzado y un simbolismo que nos emociona por su polisemia. Creo que estás en plena forma, compañera.

Un saludo con aplausos.
Óscar

[Marisa Peral]

[quote="Ana Muela Sopeña"]

Sin duda, estás en forma querida Ana.
Todos tenemos muros, corazas que nos protegen, o eso creemos.
Hace un rato escuchaba en la radio, que me acompaña mientras trabajo, a una madre que hablaba de su hija autista, durísima entrevista y terrible la vida para las familias que sufren este problema. Y tu poema ha hecho pensar que su mundo es así.
Una belleza, Ana, felicidades.
Un beso.

[Rafel Calle]

El muro que él tenía
era como el cemento,
le aislaba de la vida y de la muerte,
le dejaba confuso con su miedo.

A veces parecía un subterfugio
para no decir nada, salvo el eco
y soñar con los árboles
atado a los conflictos de los sueños.

Se metía en su mundo de utopías,
luego se desbordaba en el silencio
a través de la piel,
más allá de la línea del desvelo.

El instinto de arena era su ley,
él jamás concebía una esperanza
porque su muro era
un círculo de furia en una balsa.

A veces no podía contenerse
y doblaba oraciones por palabras,
para ensoñar el tiempo de la luz,
como un bálsamo triste frente al alma.

Al final la nostalgia le contuvo
de seguir su camino sin templanza,
imaginando el reino de las sombras
en mitad de huracanes, entre brasas.


Ana Muela Sopeña

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Hermoso e interesante trabajo, amiga Ana, donde desarrollas una versificación polimétrica con un ritmo ágil, variado y sin contradicciones, y una estética ideal para envolver un discurso con pasajes altamente evocadores.
El encierro frente al miedo, la utopía, los sueños inalcanzables, la endeblez de la arena y la noria como una costumbre de ida y vuelta a ninguna parte.
Ha sido un placer leerte. Felicidades, compañera.
Abrazos.