Miguel Angel Fernández Lu escribió:Excelente poema una vez más donde te desenvuelves como el pez en el agua, y la maestría de tu excelso vocabulario. Un gozo no solo para la vista sino también para los sentidos.Óscar Bartolomé Poy escribió:no fluye el mar en la garganta
ni hace presa el orgasmo
tiemblas como un sol epiléptico
con el cardumen ansioso de gándaras
y la voz asomada al cuello
el tren apaga la sed de fuego del raíl
donde la noche es un hombro lastimoso
–es inútil descalzarse de féretros los labios–
lágrimas como polvo de ángel
en los bajíos de la tristeza
tierra en los ojos cenizas de un osario
sombras que caminan sin zapatos
contrabajo
sombras despellejadas arrastrando infamias
despiece de versos
diáspora de mariposas
crespones a luz de gas
sangre moteada de sangre
el vuelo del trapecista
parece que va a nevar,
musitan los pájaros derretidos
en la linde de los bosques
desovillas un esqueleto en la tramoya de tus manos
–desierto rojo sílice–
y tus manos rozan la ataraxia de mi libertad
el éxtasis de la begonia
fulgura coruscante
sin tiznes ni birretes
y en la cascada cloquea la voz del oráculo
diáfana como el agua
acaso primigenia
Un abrazo, estimado Öscar.
Miguel Angel.
Éste pertenece al orden de mis poemas desestructurados, donde me olvido (hasta cierto punto) de los signos de puntuación para buscar un ritmo diferente (más libre, menos pautado) al que pueden darme los puntos y las comas y el formato clásico en estrofas. Son como versos manumitidos que se columpian en liviandad del éter creativo, aunque soy consciente de que la libertad creativa absoluta es una quimera.
Me alegro de que lo hayas disfrutado y te agradezco, cómo no, tus generosas palabras. Un fuerte abrazo, Miguel Ángel.