José Manuel F. Febles escribió:OLVIDAR EL AYER POR OTRA SOLEDAD
Viví en la plenitud
de una vida sin rumbo,
de un reloj que empezó a sentir, sin más,
el sello mantenido de la prisa
olvidando las fases de lo incierto
que por venir llegó en el temblor de la noche.
El insomnio me acosa en la almohada
para conocer la verdad de mí mismo,
ese perfil que se esconde cansado
como un paisaje
en un día de niebla en mis recuerdos.
He perdido las horas sin sentir,
sin darme cuenta apenas
que el maldito reloj me ha convencido:
olvidar el ayer para otra soledad.
Lo más difícil de aceptar es que se viaja a ningún lugar solo. Ah! Pero esos momentos de esencia, muchos, salpicados en la arena del tiempo, ay! querido José Manuel, no lo olvidemos. Es un poema duro como una aguja de acero en la niña de los ojos de Dios. Un abrazo, E. R. Aristy