Gracias a tí, Curra por pasar y dejar tu huella, por el tiempo para el poema.curra anguiano escribió:Precioso gracias
Un abrazo.
Carmen
Moderadores: J. J. Martínez Ferreiro, Rafel Calle
Un lujo tu presencia entre mis humildes letras, gracias por venir y dejar tu huella.María José Honguero Lucas escribió:Cada vez me gusta más leerte.
Me encantó, de veras.
Un abrazo
Gracias, Pilar por tu presencia y por todo el aliento que me llega a través de tus amables palabras.Pilar Morte escribió:Me entusiasma la sinceridad de tus versos, esa bella sencillez que atrapa. Felicidades
Besos
Pilar
Un placer, siempre, que tú pasas, gracias por tus generosos comentarios, Pepa.Josefa A. Sánchez escribió:Me gusta la cercanía de tus versos, su meridiana claridad. Un placer, siempre, leerte.
Un abrazo.
Pepa
Es cierto, Luna, estos 3 últimos poemas son como una saga, en realidad es un cronológico. No los he escrito ahora, tienen algo de tiempo, era como mirar las cosas con una distancia y poner una distancia entre ellos, a ver qué pasaba. Tu ojo, siempre atento, lo ha captado, también por esa familiaridad que sentimos y que nos une.Luna de Nos escribió:Carmen López escribió:Yo hubiese querido compartir cualquier cosa contigo,
todo, menos el pluscuamperfecto de subjuntivo,
conjugar contigo todos los tiempos verbales.
Yo quería buscar la espuma de tus manos,
ese temblor de ala de pájaro en mi regazo
que hacía que corrieran líquidos mis ojos,
la quilaridad que buscaban nuestros cuerpos,
saber por qué tenías la mirada tan triste y la sonrisa tan franca,
y encontrarle algún parecido a mojarse a cuerpo abierto bajo la lluvia.
Yo quería pegarme a tu piel con un imán de neodimio,
yo quería mirar por la rendija de lo imposible,
de lo casual, de lo improbable, de lo inexacto,
posponer contigo cualquier acto de cobardía,
asesinar toda indiferencia,
abonar la tierra de gestos y palabras.
Yo quería anclar mis besos en la latitud de tus labios,
avanzar en tu cuerpo buscando su humedad,
fertilizar el aire con fuegos y latidos,
debilitar hasta el límite todas las sombras
y buscarle un corazón a las estrellas
Yo quería conocer cuantas monturas tiene la noche,
que me recitaras poemas nunca escuchados,
sentir calor entre tus sabanas gastadas,
vaciar tu corazón de tanto desecho sólido
y hacerte respirar...
Ya ves, ahora sólo me queda el subjuntivo,
o conjugar en imperfecto para explicarme
tanta derrota en nuestra historia,
los recuerdos se hacen cada día más tristes,
pero, el olvido es sólo un desesperado intento,
ahora, me gustan los poemas tristes,
que siempre hablan de nosotros,
...los poetas,
... los cobardes.
Carmen, tus últimos tres poemas, que aún no alcanzo a comentar, forman algo así como una 'saga' y entonces ahora quedo esperando el próximo, como si fuera un capítulo más.
Hay gente que escribe bien, hay gente que transpira poesía, y ése es tu caso, no es algo que pueda aprenderse con fórmulas mágicas o como cuando leemos H20 e indefectiblemente el resultado es ese vital elemento, va más allá, algo así como cierta transparencia que se nota, en el texto y más allá de él, bueno creo que estoy entreverando la cosa, así que tan solo decirte que es una gran alegría poder leerte cada vez, abrazos, Luna.-
Muchas gracias, por tus comentarios generosos, estoy con poco tiempo en estos instantes, pero he sentido la amabilidad de tus palabras en este poema y en los anteriores, te lo agradezco de corazón, no te conozco aún, he leído tus poemas y sólo puedo decir que es un lujo encontrarte en los míos, tu pluma es magnífica y es honor que te pases por estas letras mías.Óscar Bartolomé Poy escribió:Carmen López escribió:Yo hubiese querido compartir cualquier cosa contigo,
todo, menos el pluscuamperfecto de subjuntivo,
conjugar contigo todos los tiempos verbales.
Yo quería buscar la espuma de tus manos,
ese temblor de ala de pájaro en mi regazo
que hacía que corrieran líquidos mis ojos,
la quilaridad que buscaban nuestros cuerpos,
saber por qué tenías la mirada tan triste y la sonrisa tan franca,
y encontrarle algún parecido a mojarse a cuerpo abierto bajo la lluvia.
Yo quería pegarme a tu piel con un imán de neodimio,
yo quería mirar por la rendija de lo imposible,
de lo casual, de lo improbable, de lo inexacto,
posponer contigo cualquier acto de cobardía,
asesinar toda indiferencia,
abonar la tierra de gestos y palabras.
Yo quería anclar mis besos en la latitud de tus labios,
avanzar en tu cuerpo buscando su humedad,
fertilizar el aire con fuegos y latidos,
debilitar hasta el límite todas las sombras
y buscarle un corazón a las estrellas
Yo quería conocer cuantas monturas tiene la noche,
que me recitaras poemas nunca escuchados,
sentir calor entre tus sabanas gastadas,
vaciar tu corazón de tanto desecho sólido
y hacerte respirar...
Ya ves, ahora sólo me queda el subjuntivo,
o conjugar en imperfecto para explicarme
tanta derrota en nuestra historia,
los recuerdos se hacen cada día más tristes,
pero, el olvido es sólo un desesperado intento,
ahora, me gustan los poemas tristes,
que siempre hablan de nosotros,
...los poetas,
... los cobardes.
Todo el poema es precioso, pero esos versos que te he subrayado me han parecido de una extraordinaria belleza. Tú sí que sabes conjugar los tiempos verbales.
Por cierto, no sé qué significa "quilaridad". No está recogida por el DRAE.
Saludos, Carmen.
Gracias, Ferreiro por tu presencia y tu amable comentario.J. J. M. Ferreiro escribió:Un poem a precioso , amiga Carmen. De gran suntuosidad expresiva: sensual y tierno a la vez... Entregado.
Bicos.
Me alegra si te gustó el poema Israel, me encantó que dejaras tu huella en él.Israel Liñán escribió:Carmen la primera estrofa te atrapa, hace que sea imposible no querer terminar de leer el poema, y el cierre me encantó. Un poema hermoso.
Un abrazo.