Sabemos de ti

[Arturo Rodríguez Milliet]

Sabemos de ti,
alucinado aventurero,
del sedentario asombro
que habita en tus fibras,
de tu corta estatura
y del largo de tus dedos,
de tu amor por los candados
y tu desprecio a las mamparas
entreabiertas.

Sabemos de ti
y tus minúsculas batallas,
del sudor en tus sueños
y el tremor en tus labios
cuando articulas silencios.

Sabemos de ti,
alucinado aventurero.

Te están señalando
los estrategas del estiércol.

[E. R. Aristy]

Sabemos de ti,
alucinado aventurero,
del sedentario asombro
que habita en tus fibras,
de tu corta estatura
y del largo de tus dedos,
de tu amor por los candados
y tu desprecio a las mamparas
entreabiertas.

Sabemos de ti
y tus minúsculas batallas,
del sudor en tus sueños
y el tremor en tus labios
cuando articulas silencios.

Sabemos de ti,
alucinado aventurero.

Te están señalando
los estrategas del estiércol.

Creo que todos hemos sido, o sentido como ese alucinado aventurero. Me gusta el tema que exploras, Arturo. Condiciones del psikis. Me conmueve y me parece diciente ese cierre. Te felicito. ERA

[Marius Gabureanu]

Este poema parece la misma pesadilla del alucinado aventurero, su doble personalidad puede ser, muy ingenioso, me ha encantado. Un abrazo y Feliz Navidad, Arturo. También eso de articular silencios, es un hallazgo brillante.

[Guillermo Cumar.]

El osado aventurero que disfruta logrando salir de lo difícil
ha inspirado un poema de crítica a los desvaríos.

un abrazo

[Luis M]

Muy buenos versos, Arturo ...me gusta mucho como escribes. Mi sincera felicitación, compañero. Un fuerte abrazo y Feliz Navidad.

[Josefa A. Sánchez]

Me ha gustado acercarme a tus letras. Que el Nuevo Año te sea propicio.
Un abrazo.
Pepa