así se irá mi alma detrás de ellas,
abre tu ventana debo pedirte,
pues llegaré cansada de viaje extenso.
Como las golondrinas, soy una de ellas
remontaré mi vuelo con la esperanza
de verte aunque tan solo sea un instante
el instante supremo en que pueda amarte.
Como las golondrinas aunque parezca
frágil y casi nívea, soy fuerte y quiero
posarme cercas tuyo, mientras tus ojos
me recorren despacio, es lo que quiero.
Será entonces mi vida, que de repente
no seré golondrina, seré mujer,
para darte mis besos, calladamente
y convertirme en agua... para tu sed.
