Editorial Alaire

Todas esas imágenes directas al olvido,
de dónde habrán salido.
En la voz de los ángeles no interviene el viento.
No hay dos labios sin beso, sin aire, sin aliento.
Solamente con luz se puede imaginar.
En la esquina de un bar, o en el fondo del mar.
La palma de mi mano, la línea de la vida.
El calor del verano, o de la despedida.
La calma no se siente utilizada.
Hay quien dice que no se arrepiente de nada.
Con una vida a lomos, o por tomos.
Querer o no querer, no es negociable.
Hay actos que responden por sí mismos.
Cuando apremia la duda, todos son abismos.
Si no hay quien te ame, el resto es desechable.
Siento haber sido yo, y no haber sido yo.

Ricardo López Castro escribió:Todas esas imágenes directas al olvido,
de dónde habrán salido.
En la voz de los ángeles no interviene el viento.
No hay dos labios sin beso, sin aire, sin aliento.
Solamente con luz se puede imaginar.
En la esquina de un bar, o en el fondo del mar.
La palma de mi mano, la línea de la vida.
El calor del verano, o de la despedida.
La calma no se siente utilizada.
Hay quien dice que no se arrepiente de nada.
Con una vida a lomos, o por tomos.
Querer o no querer, no es negociable.
Hay actos que responden por sí mismos.
Cuando apremia la duda, todos son abismos.
Si no hay quien te ame, el resto es desechable.
Siento haber sido yo, y no haber sido yo.

Además de los versos destacados, celebro el manejo consciente que haces de las rimas internas y los pareados junto a otros recursos que sirven bien al poema.
Salud.

Pasa a la Sala de Espera.

Sale de la Sala de Espera.

Hermoso e interesante trabajo, amigo Ricardo.
Abrazos.

Ricardo, me ha gustado mucho este poema donde los conceptos van desprendiendo irremediablemente sus cualidades humanas y que tú las haces poéticas.

Todo un placer de lectura, querido amigo.

Abrazos y salud.

Ricardo López Castro escribió:Todas esas imágenes directas al olvido,
de dónde habrán salido.
En la voz de los ángeles no interviene el viento.
No hay dos labios sin beso, sin aire, sin aliento.
Solamente con luz se puede imaginar.
En la esquina de un bar, o en el fondo del mar.
La palma de mi mano, la línea de la vida.
El calor del verano, o de la despedida.
La calma no se siente utilizada.
Hay quien dice que no se arrepiente de nada.
Con una vida a lomos, o por tomos.
Querer o no querer, no es negociable.
Hay actos que responden por sí mismos.
Cuando apremia la duda, todos son abismos.
Si no hay quien te ame, el resto es desechable.
Siento haber sido yo, y no haber sido yo.

Consigues observar la dualidad, Ricardo Lopez Castro. Este poema toma cuerpo porque está y es meditación. Valoro estas disertaciones porque son anímicas, " Siento haber sido yo, y no haber sido yo. " Vas por un esplendoroso camino, amigo mio. Abrazos, ERA

Hola Rafel.
Gracias miles por tus palabras para este trabajo.
Abrazos y felicidad.

Julio, me alegra tu comentario, y tu análisis, y me alegra que te hayan gustado los recursos empleados.
Abrazos y felicidad.

Gracias miles, estimado Ferreiro.
Me ha gustado mucho el apunte que aquí expones.
Abrazos y felicidad.

Gracias miles, amiga ERA.
Me halaga lo que me dices.
La verdad es que muchas veces me encuentro atrapado entre dos realidades.
De ahí que no sea fácil no caer del alambre.
Abrazos y felicidad.