juan delgado escribió:He decidido pintar un bodegón.
Necesito que el aire deslice sus dedos de brisa
sobre el mantel de pavos azules y juncos ocres
orillados al borde de tus manos....
Aparta un poco el meñique.
Baja la mirada del candil que la luz
no mueva los crepúsculos. Por favor,
no va bien sus lánguidos reflejos.
Ya sabes que pretendo algo más alegre;
más en sintonía con el agua de la jarra
que mezcla la profunda onda del pozo
con los límites perdidos de un fino cristal
donde se vislumbre una naranja abierta
y sorprenda aumentada la mancha
de la diminuta uva carmesí.
El limón hundido en el plato:
redondo, amplio, rotundo,
delicado en su loza de nenúfares dormidos.
Un momento ...
que coloque con cuidado las rosas
al lado del rayo de sol. Déjalos,
no importa que hablen de jardínes
o paraisos perdidos, asi estarán mas quietos.
Voy a acercar el lienzo, lo he preparado
con albayalde y sinsabores. Asi los tapo.
Darán textura amarga al tiempo liso
donde un gorrión se quedó congelado
en el inicio de un trino y la gota de lluvia
sobre el alero del tejado.
La claraboya deja caer el vivo azul
del cielo sobre la cuchara de alpaca.
Avivo la llama: tres bermellones diminutos
y uno con más empaste sobre tu frente.
Las hormigas tantean las formas de los sueños.
Acerca la silla de nieve y fuego. Sopla
tu aliento, abrázame en color y forma,
aunque esto sea solo un juego.
Vamos, ¡te lo ruego!, que hoy
he decidido pintar un bodegón.
Acerco las manos que veo ya extrañas
como alondras del fango iniciando un vuelo.
Un poema para releer y no perdernos una sóla connotación. Buen hacer, buena inspiración. Te felicito, Juan. ERA